Escrito para ti, de un amor frustrante

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Nota de la escritora:
El amor que pude sentir hacia ti era verdadero, todo lo que hice por amor, fue por instinto propio, cuando te cuidaba en las noches más oscuras, para que no volvieses a sentir temor, cuando te volvías a entristecer con tus supuestos defectos, para hacerte reír hasta que te doliera la costilla, cuando te quedaba esa chispa que encendía tu corazón, para que no se apagara el mío, porque siempre hubo ese nosotros. Te dedico unas palabras, que escribí con franqueza a las cinco de la madrugada, cuando usualmente me acuesto a la una; estoy completamente despierta, siendote sincera, con un maldito vacío en el corazón.

Alguna vez me preguntó por qué sol se tarda en ocultar, por qué la luna no resplandece todo el tiempo, o si alguna vez debería caer bajo un pozo estrellado. Todo se refleja en las absurdas actitudes que he tenido contigo, me he vuelto muy distante, muy seca, sin ninguna pizca de ternura, la llama de mi pasión se apagó, mis labios ya no quieren más de los tuyos, y no sé qué me pasa, como que ya no soy la misma, mi cabeza anda alardeando a cada instante, en cuál camino debo escoger, aunque mi recorrido contigo era feliz, ahora no lo sé.

Tu esencia, es algo que no puedo ya recordar, he estado en una caída profunda, en ella se reflejaba la persona que soy realmente, no puedo ser más dulce, ni tierna, tal vez sólo fingí serlo. En realidad, cambié por ti, intenté ser más cariñosa, demostrar más amor, demostrar qué puedo vencer mis temores agobiantes, creí que podía con esto.

Quizá no sea la novia perfecta, ni la mejor acompañante, todavía tengo pesadillas de noche, recuerdos que no puedo olvidar, trago más de cuatro copas de tequila cuando mis frases hirientes conllevan a tu voz frágil, esa nicotina que cedo a aspirar cada noche, y entre muchas otras cosas, que quizá hagan que cambies de opinión acerca de mi persona.

No soy lo que crees, no soy esa princesa de cuentos de hadas, en la que al final tiene los finales más bonitos, no.

No soy aquella, que te escriba un mensaje de texto cada día, diciéndote que te ama, o una carta, cuando las líneas caigan.

No soy la que podrá complacerte, cuando me pides que hagamos dulcemente el amor.

No seré aquella que esté pendiente de ti, no tengo tiempo para alguien que no sea yo.

No soy la chica más bonita, en el exterior te pierdes de muchas, que te podrán dar lo que necesites.

No creo que nos veamos en un futuro lejano, creo que he cometido tantas faltas como un rey de pecadores.

Habrá chicas que estuvieran muy locas por ti, yo en cambio no.

No siento lo mismo que sentía hace dos años.

No siento los besos como necesidad, sino para tu deleite.

No siento aquellas mariposas, que me dejaban sin aire.

No siento nuestros abrazos como refugio, sino como necesidad.

No siento el orgasmo, que sentía tan de repente, cuando me entregabas todo tu cuerpo.

Ya no acepto más rosas, sino que me escuches atentamente.

No me siento enamorada.

No me siento feliz.

No me siento yo.

No te hago feliz, por lo que más esté a mi alcance.

No quiero dejarte ir, pero tal vez sea lo mejor.

Será mejor, hacerte libre.

Qué te puedas enamorar de quien quieras.

Qué no sigan lastimando tan seguido.

Qué te amen intensamente como lo hice yo.

Debo aprender lo que es el amor en realidad, como me lo enseñaste tú, lamento no poder haber seguido tu enseñanza cariño, espero que algún día volvamos a cruzar miradas, sonreír y seguir nuestras vidas, sabiendo que todo estaba cayendo en la ruina.

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Escrito por; @andreissanchez