Del jardín a la cocina, degustando los frutos de la cosecha

Las malangas Colocacia esculenta están listas para cosechar y cocinar, directo desde el jardín hasta la cazuela podemos disfrutarlas este día como les muestro en las siguiente imágenes el procedimiento que hemos seguido para disfrutarlas a su máxima plenitud.

Primero las colectamos y lavamos, lo que es lo más complicado dado que al ser un tubérculo están completamente llenas de tierra, luego las pelamos un trabajo bastante tedioso y delicado por la gran cantidad de savia que tienen en su cuerpo, luego de pelarlas y lavarlas con un cuchillo procedemos a cortarlas en lascas de un centímetro de grosor, les agregamos un poco de sal para extraer el agua, y de paso agregarles el condimento por excelencia.

Ponemos a hervir aceite en una cacerola y cuando está caliente las ponemos a fritar, y vamos volteando a medida las mismas van tornándose su color dorado, y una vez las tengamos completas las servimos y disfrutamos como un acompañamiento de nuestros platillos o simplemente como un snack si las dejamos fritar hasta dorarlas completamente, en realidad quedan muy crujientes, podemos agregarles pimienta para resaltar su sabor y textura.

Como ven esta es una forma rápida y práctica de utilizar las frutos de nuestro jardín ya que no hay nada como disfrutar nuestras cosechas tratando de aprovecharlas al máximo.

Gracias por la visita recuerden material propio, fotos incluidas.