Luego de una discusión con su novio Ben, Michelle hace sus maletas y se marcha de casa, durante el trayecto sufre un accidente en su automóvil y cuando despierta está encadenada a una pared sin terminar, sin ventanas, con sólo un colchón en el piso, semidesnuda y con un aparato ortopédico en su rodilla, lo que la hace querer escapar inmediatamente; descubre que está en un búnker subterráneo junto a su dueño, Howard y su vecino Emmet. Howard quien la rescató del accidente en mitad de la carretera y que dice que la trajo consigo para curarla, cuidarla, y apartarla del peligro al que se enfrenta la población en la superficie; le cuenta que ha ocurrido una catástrofe y que el aire de la tierra se ha vuelto mortal. La duda de que sea cierto o no carcome a Michelle, y aunque Emmet le asegura que así fue siempre quedará la duda; además que es claramente notorio que Howard es un captor desequilibrado y ella busca las maneras de huir de su confinamiento, con ayuda o no.

Esta película se aparta de la anterior al incorporar a actores de mayor trayectoria, como John Goodman, Mary Elizabeth Winstead y John Gallagher Jr. Howard, como ya lo dije anteriormente es un hombre que se nota desde el día uno que no está nada bien de la cabeza y la interpretación por parte de John Goodman es como siempre, formidable, convirtiéndolo instantáneamente en un villano al que por partes sientes que puedes apiadarte de él. Lo mismo se puede decir de Mary Elizabeth; una actuación perfecta, no nos muestra una imagen errada de la mujer débil, sino de una que lucha por salir de cualquier manera, y de esta forma nos infunda el terror que siente de estar allí y la duda de saber si en realidad el mundo de afuera se había acabado; hace meternos en la piel del personaje y nos infunde querer darle todas las fuerzas para salir de allí. El personaje de Emmet interpretado por John Gallager Jr. al principio me pareció que sobraba, pero fue el que mantenía en equilibrio todo el tema detrás del secuestro de Michelle, haciéndo de él un personaje pacífico y con el que sientes total empatía.

Está pieza es completamente magnífica, y se aleja completamente de la primera, de hecho nos hace entrar en una tensión y en paranoia en todo lo que va de cinta, porque a pesar de que ya vimos la primera no sabemos si en realidad Howard inventó toda la catástrofe que estaba pasando arriba para mantener cautiva a Michelle, así que juegan con la psicología del espectador de una manera brillante. Todo esto ocurrió gracias a la genial producción de J.J. Abrams al colocar detrás de las cámaras a un novato Dan Trachtenberg para dirigir esta obra, con unas secuencias realmente memorables que retratan un perfecto guión escrito por Damien Chazelle, Josh Campbell, Matthew Stuecken, que nos mantienen durante toda la película en una completa tensión y un final, que aunque fuera predecible, no le quitan absolutamente nada a la película.

Obviamente se volvió una de mis favoritas, y aunque quisiera adelantar mucho más no lo haré para no caer en SPOILERS y dar más impresiones y la comparación entre las dos; pero para hacerlo les recomiendo, si no la han visto, que se pongan al día con estas dos películas y también con The Cloverfield Paradox, que es la tercera y en la que además explicaré porque ninguna de las 3 películas se parecen siendo de la misma franquicia y que además puedes verla en cualquier orden. Yo hubiese preferido ver esta de primero, así que si no la han visto pueden empezar por esta AMPLIAMENTE. Les dejo el tráiler a continuación y espero que la vean, 100 % recomendada y les juro que no se van a decepcionar.

TRAILER