¿Cual es tu razón de despertar?

Acostumbramos que un despertador sea quien nos despierte por las mañanas, postergando el inminente inicio del día, cuando lo que se desea es continuar durmiendo. Aunque a decir verdad hay personas que entrenan a sus mentes que deben despertar a una hora predeterminada y se vuelve automático, el problema de entrenar la mente para que te despierte a la hora que deseas es que en los días libres es complicado decirle que es día para dormir y no para trabajar.

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Para despertar por las mañanas, necesitamos tener ganas de vivir, pero en la mayoría de las veces necesitamos un ayuda para quitar la pega de nuestros párpados, café, té o una persona. En el caso del café es un golpe más fuerte, que nos despierta se podría decir que casi inmediatamente primero por la cafeína y adicional alguno le agregamos azúcar, eso hace que nos sintamos mucho más enérgicos.

Por otra parte, tenemos el té que de igual forma nos despierta, pero esta vez de una manera más suave y deja como una especie de relajación que es muy parecida a la que se consigue, como cuando meditamos.

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Pero creo que hay una razón más poderosa que el té o que el mismísimo café de Juan Valdez, y es despertar por una persona. Y acá quiero abrir y dejarlo a que tu mi querido lector tomes el puesto con el que más te sientas cómodo. Y cuando digo una persona quiero referirme a que en muchas ocasiones nos despertamos ansiosos porque vamos a ver a esa persona que tanto nos gusta y que después de tanto tiempo vamos a volver a ver. Puede ser que hoy llegó el gran día de conocer a nuestro hijo. Ver a los abuelos porque te dieron unos días libres en el trabajo y decidiste tomar el primer avión para ir a verlos. Los nervios porque hoy comienzas un nuevo empleo y no sabes quienes serán tus compañeros.

Cuando te despiertes y te encuentres feliz, decidas colocar el reproductor con la música más alegre, decidas vestirte con todos los mejores ánimos, con la mejor prenda que tengas y llegue el momento de mirarte al espejo, recuerda que aun no has tomado café y mucho menos té... hoy te despiertas feliz porque sabes que vas a ver a esa persona especial.

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