Gran ejemplo de esto lo vemos aquí en Venezuela con el metro de Caracas, quienes pudimos conocer la Venezuela de ayer veíamos como las personas afuera eran unas y apenas entraban a la estación se transformaban. Apenas pisaban el primer escalón las personas se convertían en ejemplo a seguir caminaban por la derecha no lanzaban basura al suelo , nadie comía ni un caramelo, menos aun pensar en vender cosas en los vagones, nunca supe en aquellos tiempos, de robos dentro del metro, nadie ponía las patas en las paredes (Sí, patas pues quien hace eso no tiene pies tiene patas) Con el pasar del tiempo las personas fueron irrespetando todas las normas del metro y se convirtió en un lugar solo comparado con lo que vemos en películas del lejano oeste una tierra sin ley tierra de nadie. Nos queda la gran pregunta. ¿Cual es la mascara en este caso? ¿Los que se comportaban bien antes? ¿Los que se comportan de modo irracional hoy en dia? Ambas tendrían como meta sobrevivir. En el ayer nadie quería ser descrito por los altavoces cuando les llamaban la atención sometiéndolos al escarnio publico, eso era un sentimiento de terror inmenso.
Hoy en dia quienes deben aventurarse a usar el metro no pueden aparentar ser débiles ni tener la mínima pizca de empatía porque o se aprovechan para robarte o te pasan por encima literalmente.