Imaginería: La ciencia de la imaginación. #ADINFINITUM

luismy (60)in #spanish • 5 years ago

Muchos creen que la imaginación es un juego de niños. Que solo los niños son capaces de acceder a la imaginación sin límites. El adulto (que es un niño que ha dejado de creer) ya no accede de la misma manera a la imaginación porque piensa que no es real. Un niño sin embargo sabe que su imaginación es tan real como lo que está viendo en frente de si mismo. Piensa en esto: muchas veces sufrimos más por lo que nuestra imaginación nos muestra que por lo que la realidad es.

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En esencia, LA IMAGINACIÓN ES LA FUENTE DE LA REALIDAD. Todo lo que somos, hacemos y tenemos fue antes imaginado por a mente universal. Lo que le pasa a los adultos es que ya no creen en el poder de su imaginación. ¿Tenemos miedo de que lo que imaginamos se haga realidad? Si. ¿Por qué? Porque nos pasamos la vida imaginando cosas negativas.

¿A cuantas personas conoces que al imaginar una situación no se pone en lo peor?

Así de simple. Tenemos miedo. Pero no a la imaginación, sino a nuestro propio pensamiento. Y todo porque tenemos la mente llena de malos pensamientos. Seguro que habéis escuchado el dicho: PIENSA MAL Y ACERTARÁS. Pues ES VERDAD. Pero al igual que lo es su opuesto: PIENSA BIEN Y ACERTARÁS. Pero nos resulta más cómodo pensar mal, que cambiar nuestro pensamiento. Aunque en todo momento es nuestro ego el que se resiste a ver la realidad tal y como puede ser, en vez de como cree que es.

¿PORQUÉ? Porque lo que piensas lo creas. Si quieres pensar mal, seguro que acertarás. La realidad te mostrará aquello que quieres ver. No significa que el lado bueno no exista, no. Pero tu estás eligiendo ver la realidad desde su lado negativo. Es tan simple que a veces nos cuesta una vida entera tomar cuenta de ello. ¿PORQUÉ? Por lo mismo, preferimos ver la dificultad que hay en todo, en vez de ver la simpleza. Y es que si queremos ver que las cosas son difíciles, para nosotros serán difíciles pues así lo estaremos proyectando. La realidad puede ser otra muy distinta. Da igual de qué hablemos, sufrimiento, muerte, hambre, pobreza, guerras... Todo eso son reflejos de lo que es el ser humano. Pero no se trata de negar lo evidente, evitarlo o querer cambiarlo a la fuerza, sino de cambiar uno mismo. De aceptar la realidad en primer lugar para poder transformarla, transformándonos nosotros primero.

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No tengas miedo de imaginar, pues tu imaginación es real y puede moverte hacia lugares que nunca creerías posibles. Simplemente atreviéndote a imaginar ya estás cambiando tu realidad. Imagínate cómo sería vivir la vida de tus sueños, libre de sufrimiento y de pobreza. Libre de guerras y conflictos. Una vida llena de paz, armonía, riqueza y abundancia en todos los sentidos. Si eres capaz de imaginarlo, imaginándote a ti mismo viviendo esa vida, entonces ya estás más cerca de cumplir tu sueño que muchos otros que no se atrevieron a imaginar. Es tu deber ser responsable con tus visiones y escuchar a tu consciencia cuando te envíe mensajes que te hablen de cómo alcanzar tus sueños a través de la intuición.

También puedes aprender a usar el poder de tu imaginación aprendiendo a usar la Ley de atracción, que no es otra cosa que la fuerza magnética que relaciona lo que deseas y lo que atraes. Otra de las leyes que puedes usar para hacerte consciente del proceso de atracción es la Ley del espejo, que te enseña que todo lo que ves es tan solo un reflejo de lo que tu eres, y que cambiando lo que eres puedes cambiar lo que ves.

Como ves, son muchas las técnicas que te ayudan a entender lo siguiente: TU ERES EL CREADOR DE TU REALIDAD, y tu reacción a esta afirmación determinará el estado de percepción que tienes en este momento. Si reaccionas con incredulidad, tendrás que trabajar tu creencia en tu propio poder. Tendrás que empezar a creer que tus pensamientos tienen poder sobre la realidad, que los pensamientos son cosas y tienen energía y por ende, vibran y resuenan con otros pensamientos. Así se crean los patrones de pensamiento que determinarán tu forma de percibir la realidad, que es totalmente subjetiva, como los sueños.