Acceso intravenoso ¿Te han pinchado las venas?
Cuantas veces nos ha pasado que nos resistimos al hecho de acudir a un centro médico para atender una emergencia de salud o para ser ingresado al área de hospitalización, solo por el hecho de pensar que lo primero que harán al llegar será inyectarnos, pincharnos las venas y eso a todos nos da algo de temor. Sé perfectamente lo que se siente porque personalmente he estado de los dos lados de la aguja; he sido quien pincha a las personas y también he sido pinchada.La segunda no es nada agradable, y entiendo la sensación de causamos las enfermeras en los pacientes cuando nos ven con el kit de venoclisis en las manos.
El miedo a ser pinchados por agujas o inyecciones lo sentimos todos desde la niñez por la desagradable sensación que produce la inserción de la aguja en la piel, hay para quienes este miedo se convierte en un problema mucho más serio y difícil de controlar. Este miedo es conocido como tripanofobia que significa fobia a los piquetes, agujas o inyecciones.
Ahora bien, ¿porque es necesario pincharte las venas al momento de tu ingreso al hospital?
Cada paciente que ingresa a un centro médico se recibe con el debido protocolo hospitalario, parte de ese protocolo es la canalización de un acceso venoso periférico para el posterior cumplimiento del tratamiento médico indicado y como muchos saben este procedimiento tan fastidioso es realizado por las enfermeras, Este procedimiento es llamado venoclisis y consiste en la punción de una vena para introducir un catéter que tendrá un punto de acceso externo donde será administrado el medicamento o infusión indicada hasta el interior de la vena, donde la sustancia iniciara su recorrido en el torrente sanguíneo para su rápida efectividad.
Esta punción se realiza mayormente en los miembros superiores del cuerpo en caso de pacientes adultos, algunas veces es necesario cateterizar esta vía de acceso en miembros inferiores cuando se trata de pacientes pediátricos.
Estos catéteres se conocen con el nombre de jelcos, es un tubo delgado de plástico, con una aguja guía estéril que permitirá la punción y luego esta guía es retirada para fijar el catéter con facilidad, se presentan en diferentes tamaños y colores a elegir según sea necesario, mientras mayor es el calibre del catéter, más rápido será el efecto del medicamento aplicado.
Según la imagen de referencia, de izquierda a derecha se los presento:
Los jelcos de color naranja de calibre #14 y color gris calibre #16 son para uso en procedimientos de accesos venosos centrales o en punciones pulmonares, no se utilizan para vías periféricas en pacientes ya que podrían romper las paredes de las venas.
Los jelcos de color naranja de calibre #14 y color gris calibre #16 son para uso en procedimientos de accesos venosos centrales o en punciones pulmonares, no se utilizan para vías periféricas en pacientes ya que podrían romper las paredes de las venas.
El jelco de color verde calibre #18 se usa para personas sometidas a cirugía, que reciben transfusiones sanguíneas o grandes volúmenes de líquidos.
El jelco de color rosa calibre #20 se usa también en personas que reciben grandes volúmenes de líquidos.
El jelco color azul calibre #22 se usa en personas con tratamientos medicamentosos por varios días; se usan de preferencia en niños y en adultos con venas pequeñas.
El jelco color amarillo calibre #24 se usa en niños pequeños recién nacidos y pacientes oncológicos sometidos a quimioterapia.
Antes de iniciar el procedimiento, elegimos la vena más visible y palpable para saber que tamaño de catéter vamos a usar. Las más comunes son las venas del pliegue del codo, esa donde generalmente se pincha para extraer sangre, esta es súper fácil de canalizar, sin embargo al estar ubicada en una articulación, el catéter puede doblarse en su interior impidiendo el flujo de medicamento a introducir o romper la pared de la vena, generalmente es usada para tratamientos temporales de emergencia, las venas más visibles del antebrazo son ideales para pacientes que necesitan tratamiento endovenoso de más de 48 horas por su cómoda ubicación, esta zona puede ser un poco más dolorosa que el pliegue del codo. Las venas del dorso de la muñeca también son muy utilizadas para la venopunción.
Durante el proceso de canalización de vías periféricas pueden surgir ciertas complicaciones como la infiltración que es la aplicación del tratamiento fuera de la luz de la vena, esta complicación es notoria cuando se observa un abultamiento en la zona donde se acumula el líquido a inyectar sin poder viajar por el torrente sanguíneo como consecuencia de la salida de la cánula.
Obstruccióndel flujo de solución cuando este se hace lento o se detiene por la presencia de coágulos en la entrada del acceso venoso.
Tromboflebitis es una complicación consiste en la infección del acceso venoso por el uso excesivo de la vía de acceso y puede provocar inflamación en la zona afectada y lesiones en las venas de esa zona, por esta razón es recomendable cambiar el acceso venoso máximo cada 48 0 72 horas.
Hay vías de acceso difíciles como las personas con mucho tejido adiposo y no es posible ver o palpar las venas, en este caso nos guiamos por la anatomía de la zona a pinchar.
En pacientes oncológicos se dificulta la cateterización de la vía periférica ya que por la cantidad de medicamentos y quimioterapias a los que han sido sometidos el flujo sanguíneo en sus venas se vuelve cada vez menor y su vena se observa más delgada y frágil.
Las venas de los niños suelen ser en algunos casos difícil de canalizar ya que es difícil de controlar los movimientos de resistencia que ellos ejercen para evitar que los pinchemos y esto dificulta el procedimiento
En algunos casos, dependiendo de la capacidad de razonamiento y la edad de estos pequeños podemos negociar y lograr obtener su colaboración.
![IMG_20180420_153932565[1].jpg](https://steemitimages.com/DQmUheUsaNmVQuR3Sg6oQHybUuKqDJG9v3KcLEy5jJmJvTe/IMG_20180420_153932565%5B1%5D.jpg)
Eso hice con mi amigo Jesús de 7 años quien ingreso a la emergencia por un síndrome doloroso abdominal, después de la punción y llorar un poco, se contentó con su globo de guante (foto tomada con autorización de su representante)
El personal de enfermería realiza este procedimiento desde el inicio de la carrera, significa que cuando nos desenvolvemos en el campo laboral y recibimos un paciente para venopunción se nos hace sumamente fácil y rutinario, además que podemos identificar cuando es una vena de difícil acceso y que tamaño de catéter podemos utilizar.
En un centro médico que cuenta con muchas especialidades hospitalarias cubiertas por personal de enfermería especializado para cada área, se tiene la ventaja de pedir a la enfermera que sea mas ágil en canalización de venas en personas de difícil acceso y de esta manera si se le dificulta la canalización a una enfermera puede solicitar apoyo a esa compañera que siempre puede con las difíciles
Es importante que como paciente sepas que ninguna enfermera desea fallar en la realización de este procedimiento, al contrario, a la hora de una venoclisis lo hacemos con mucho cuidado y seguridad para obtener un buen resultado y si además de tratamiento necesitas exámenes de laboratorio, se aprovecha de tomar la muestra del mismo acceso antes de comenzar a usarse para evitar que te pinchemos una vez más.
Si ves a une enfermera joven, no dudes de sus capacidades para canalizar una vena recuerda que desde el inicio de la carrera usamos esta técnica hasta el punto de perfeccionarla, sucede en el caso de algunos pacientes, sobre todo los de tercera edad que piden ser pinchados por una enfermera con más experiencia, esto puede ser relativo, hay enfermeras con más experiencia laboral que una joven y la joven puede tener más visibilidad y agilidad para lograr canalizar una vía al primer intento que la enfermera mayor.
Siempre es mejor ser buen paciente y tratar a todos con amabilidad, recuerda que la enfermera elige el tamaño del catéter con el que te va a pinchar.
Espero que entiendan que no es capricho ni maldad de las enfermeras pincharte las venas, solo usamos el método más directo y rápido para que tu recuperación sea efectiva.
A mí particularmente me toco sufrir una mala experiencia cuando me ingresaron con neumonia galopante en emergencias de un hospital publico. Me atendieron aprendices y no me conseguían las venas en las manos, me pincharon cerca de 7 veces en la mano izquierda y 3 en la derecha, hasta que finalmente llego una dama con más experiencia y lo hizo tan rápido que ni cuenta me di. Pero tienes razón, hay que confiar en la ciencia, eso lo sé. No tengo poder de voto para votarte por lo que te obsequie un buen voto a través de @adriatik Excelente publicación, como siempre apoyándote. PD: Con una enfermera como tu, ¡no tengo problema en dejar que me pinchen las veces que sean necesarias! :D
Te deseo un feliz dia y una mejor vida
gracias reinaldo por tu apoyo.
excelente post muy informativo me recuerda a mi mama ya que ella es enfermera
que excelente, muchisimas gracias aron
Excelente post. Muy interesante conocer sobre las diferencias entre los jelcos (que de hecho ni siquiera sabía que se llamaban así), ya que los pacientes los vemos todos iguales xD. Y sin duda el trabajo de las enfermeras es sumamente importante en todos los procesos médicos.
si, generalmente los pacientes desconocen esta información, solo quieren salir de esa desagradable situación sin pensar en mas nada. Yo tambien haria lo mismo :)
Felicidades por esa labor, tu post me hizo reir ya que me ha tocado vivir esas situaciones con mi hija y me hizo recordarlas.
Si con los niños siempre se dificulta un poco. Muchas gracias @jengley por leerme siempre amiga.
You got upvoted from @adriatik bot! Thank you to you for using our service. We really hope this will hope to promote your quality content!
Felicitaciones, por entregarnos esta información fundamental para todos. Es difícil escaparse a esos jelcos. Algún día nos va a tocar.
si, es difícil y desagradable pero cuando es necesario, es la mejor opción para que los medicamentos actúen más rápidamente.
Muy bueno tu post @yenncanela. Me encantó la primera foto!
saludos doc, muchas gracias
Hola, muy pertinente tu post , tengo una niña de casi 4 años y sufro más que ella cuando la tengo que exponer a esta dolorosa experiencia. Gracias por tus aportes.
hola catalina muchisimas gracias por leerlo. Es verdad es muy doloroso presenciar el llanto y desesperación de los niños cuando son sometidos a este procedimiento pero hay que ser valientes como madres y colaborar dándoles el apoyo a los niños.
Saludos @yenncanela. Información interesante. Si me toca, me dejo "pinchar" porque tengo confianza en las enfermeras, aun siendo jóvenes, quizás porque mi hija es enfermera. Ojo con algunos detalles: están pegados Losjelcos en un párrafo y al principio, el sé, de saber, lleva tilde.
muchas gracias amigo, ya hice las correcciones.
Ami a mi siempre me pinchan horrible. Se me hacen hematomas 😢 le temo a las puyas... No se por que mis venas se esconden... Son muy timidas. Pero muy bueno tu post, a pesar de mis temores👏👏