AÚN TRAS LOS GRANOS DE MAÍZ: PICO

Desde hace algún tiempo, se observa en las barriadas, urbanizaciones y zonas privadas residenciales, hombres y mujeres en estado de indigencia o abandono. En precarias condiciones recorren las casas o apartamentos, uno por uno, para ver si les dan una limosna, sobras de comida o los pongan a cargar cosas y así ganar algo de dinero. Como dice el refrán: “Todos los caminos llevan a Roma”, y respecto a llegar a la indigencia, parece que es así. Ladrones, prostitutas, alcohólicos, locos, drogadictos, entre otros, sino terminan muertos; es decir, si logran sobrevivir a chulos, traficantes y policías, terminan en el mejor de los casos viviendo de la mendicidad.

José Ramón Blanco, mejor conocido como Pico, pertenece a este grupo de personas que viven el día a día mendingando comida o en su defecto dinero. Residente del barrio El Valle, hace vida los últimos años en la urbanización Los Super Bloques. Debido a la proximidad de ambos lugares le es más fácil atravesar la cerca perimetral que separa estos dos lugares. Es importante destacar que, estas dos comunidades vecinas, son muy distintas: en la primera, las viviendas son ranchos de zinc y madera, de escasos servicios públicos; y la segunda, son apartamentos con todos los servicios básicos. Por lo que, Los Super Bloques, se convierte en especie de paraíso, en el que pedir limosna es el pan nuestro de cada día para estos que han caído, con culpa o sin ella, en el oficio de pedigüeño y mandadero.
Todos los días, a cualquier hora, se puede encontrar a Pico, caminando de aquí para allá con sus muletas. La muchachada no le arroja piedras ni gritan su nombre como antaño. Se han acostumbrado a él. Sentados en un muro bajo, al lado del kiosco de la Sra. Raquel, cuenta sobre su vida con voz ronca y mirada inquieta:

Pico: Mi nombre es José Ramón Blanco, yo, cuando muchacho, nunca llegué a estudiar porque nunca tuve un padre, ni… ni… una representante que me ayudara en mis estudios. Me puse a vender plátanos en el mercado viejo, bolsas… y por eso no estudié, nunca tuve una responsabilidad de familia… nunca tuve familia... Tengo a mi mamá muerta, hacen…uhm… 8 años, estoy inválido, incapacitado, no tengo estudios, no tengo una ayuda que nadie me ayude, me mantengo pidiendo una pequeña ayuda por aquí por los Super Bloques… los Super Bloques de Fe y Alegría…para sobrevivir y comprar mi tratamiento médico porque la… el gobierno a mí nunca me ha ayudao a comprar mi tratamiento, ni me ha dao la prótesis que me pidió PDVSA… pa… pa… para mi pierna, no me la han dao… así estoy, me encuentro incapacitao, mi edad es de 48 años y soy un viejo, no tengo capacitao, no tengo familia, estoy solo, vivo en el barrio El Valle… ayudado por la gente de los Super Bloques que son los que me ayudan aquí a mí… en el Super Bloques. Entonces, yo le pido a la gente que tomen en cuenta esto la… cosa… como estoy viviendo yo… habemos muchas personas que somos así… a mi familia… no tome en cuenta porque estoy así, ahorita… discapacitado, no tengo quien me vea con estas cosas que estoy pasando hoy en día. No tengo ayuda, para que… cómo, eh, decirte, eh… para decirte… la… medicina y mi tratamiento… tengo que pedir para comprarme mi tratamiento, pa poder comer, tengo que agarrar la calle, la acera… limpiar que María… la señora que vende pollo pa podé viví…nunca… tuve preso… reconozco que estuve preso, varios…varios delitos que cometía cuando muchacho, ¿por falta e qué?, falta de… posibilidad de mi familia, porque nunca tenía quien me ayudara, un cuaderno, un lápiz, un… nada de eso. Por eso yo siempre le he pedido a la gente que me ayuda… para que… me tomen en cuenta, a este muchacho, José Ramón Blanco, me encuentro incapacitado, no tengo ayuda, necesito una ayuda del gobierno pa que me pongan una prótesis… para que… que me cuesta 450 millones… ¿de dónde los tengo?, no los tengo pa sacarlo…

Francisco López. – ¿Cuántas veces estuviste preso?

Pico. – Tuve… dos cárcel y un poco e veces preso, cuando menores de edad… eh… de la última vez que estuve preso salí en el año 1994, el 13 de mayo, que el 12 de mayo fue el día de las madres, del 94… yo salí el 13 de mayo… del 94 día de la madre… un día de la madre… yo caí preso por varios delitos porque en verdad… no encontraba cómo… sobrevivir… y tenía que cometer el error de… tener que agarrar lo ajeno para poder comer, vestir y todo porque no tenía a nadie quien me daba pues…

López: ¿Sufriste algún maltrato cuando estabas preso?

Pico: Siiií… bastante, la… bastante maltrato tuve con la guardia, la policía… hasta toavía así, como estoy así, incapacitado estoy aguantando golpe… por ahí, por la calle, porque ellos quieren estar golpeándolo a uno… todo el tiempo maltrato a los incapacitados… que… que… queriéndole quitar los reale a uno… queriéndome quitar… que si no doy pa los refrescos… me quieren joder… que si no le doy pa los helados… yo no sé en qué gobierno estamos viviendo… yo no sé en qué gobierno estamos viviendo, porque yo consigo es para sobrevivir no para… como le hablo… no para… darle a ellos, porque ellos más bien tienen que darme a mí más bien…eh… porque yo…eh… un viejo de 44 años y no tengo quien me ayude… eh… y quien me dé, ¡pues!, un par de zapatos, no tengo quien me dé una camisa y un pantalón, tengo que pedir, comprarlo… eh… gracias a la gente de los bloque, vuelvo y repito, gracias a la gente de los apartamentos, Super Bloques, que siempre me ha ayudao… y siempre he agradecío esas cosas, me dan la comida, me dan real, me dan mi remedio… cuando se puede… pero cuando no se puede, yo, sufro… ahorita… así como ahorita, hoy domingo… 13 de… ¿De qué mes estamo?

López: Junio.

Pico: Junio… 13 de junio, hoy domingo, no tenía pa comprar mis pastillas… no tengo para comprar mis pastillas… tuve que llegarme al ambulatorio de Fe y Alegría que me pegaran un tratamiento, para que me calmara el dolor… gracias a una señora que me regalo… dos pastillas que había para el dolor… que son las que me tienen beneficiado ahí… para poder pasar la noche… ¿por qué?, porque no tengo cómo comprarla, ni quien me ayude… entonces, tengo que reunir para comprar mis pastillas, porque mis pastillas salen caras, son120 y unas valen 65 bolívares… las más baratas y la más rubi… rubitrol…

López: ¿Por qué te apodan Pico?

Pico: Bueno, porque… eso es que… cuando, cuando muchacho, cuando muchachito… cuando muchacho me pusieron ese nombre porque yo comía bulde maíz… sancochao. Entonces, me pusieron ese nombre y me quedé… Pico, Pico, y me quedé Pico, y en verdad, ese no es mi nombre, mi nombre es José Ramón Blanco… por eso es mi apodo y me pusieron así… el apodo que me ponen, pero mi nombre es José Ramón Blanco. Tengo 44 años, vivo en el barrio El Valle, estoy residenciado más que todo en Super Bloques, Fe y Alegría… Cualquiera cosa, me buscan en el abasto de Super Bloques…

López: ¿Nunca tuvo hijos?

Pico: Sí, tuve tres niñas…pero me abandonaron porque yo quedé así, incapacitao… me dejaron solo porque yo estuve inu… ñeco… soy ñeco, estuve un año en el hospital… nunca me fueron a ver… nunca tuve cuido de mi familia en un hospital… no me operaron por esto… más que todo porque nadie me cuidó… nadie… no tenía familia que me fuera a ver en un hospital… y como mi mamá estaba muerta, ¡qué carajo!

López: ¿A qué edad murió su mamá?

Pico: Yo tenía… yo estaba en la cárcel, pagando en la cárcel…yo… yo salí de la cárcel … mi mamá ya se, ya se… había muerto y estando en la cárcel mi mamá se murió, mi mamá se murió… y yo nunca llegué… supimos, que mamá se había muerto estando yo preso… yo lo vine sabiendo ya que estuve en la calle… que fue buscándola y nunca la conseguí… y fue después que me dijieron que, ¡ah!, en verdad, verdad, mamá se murió… que no te quisieron decir nada para que no te volvieras loco en una cárcel… y de allí yo quedé incapacitado… jodió pues…

López: ¿Y no tenía papá? ¿No le conoció?

Pico: No, no tenía papá, tampoco le conocí, mi papá es muerto… desde allí yo quedé un poquito dolido… consciente… solo pues… no me encuentro… como le digo… no me encuentro… así con… alegre… no me encuentro entusiasmado como antes… desde que salí de la prisión con mi mamá muerta… gracias que aquí vivo pa… pa… para hablar esto… a esto y muchas cosas más… pero cónchale, me encuentro bastante incapacitado porque… sin madre nadie no es nadie… oyó, señor…

López: ¿Nunca fuiste a la escuela primaria?

Pico: Nunca… nunca… nunca fui a una escuela…

López: ¿Y eso por qué?

Pico: No… no… porque nunca llegué… nunca llegué a… a acceder a una escuela… porque cuando me iban a inscribir… presuntamente la partida que estaba mala… entonces me fueron a inscribir, me fueron a inscribir con una partida, con una partida chimba legal y no me la aceptaron… y esa partida me la arreglaron, la petejota, estando yo preso, fue cuando me arreglaron mi partida, mis papeles… entonces cuando yo salí preso la petejota me arregló mis papeles… y… me… fue cuando arregló mis papeles… y gracias a dios que ya tengo mi cédula, tengo todo porque la petejota… eso es lo único que tengo que agradecerle yo a la petejota que me arregló mis papeles… mi partida… porque si no hubiera caído preso no me hubieran sacado mis papeles… y… ¿tú me entiendes?... porque si no me hubiera quedado… como llamado… el colombiano… porque nunca… porque a mí quien me sacó la partida fue la petejota… mis papeles… y me presentaron…

López: ¿Y nunca recibiste ningún tipo de instrucción para leer, escribir?

Pico: Nunca, nada… de eso… nunca… yo no sé firmar ni nada de eso… yo te firmo es con la huella… yo no te sé leer un periódico, yo no te sé… que a mí cualquiera me engaña con un periódico… me engaña cualquiera con un papel, con una broma… como me han engañado más de una vez… me han jodío… y yo de inocente, no sé leer y me joden quien quiera… y entonces, si hay una ayuda, de como yo estudiar, se lo agradezco, así sea de noche…

López: ¿Has tomado algún tipo de drogas?

Pico: Tuve también en las drogas… también tuve en las drogas… tuve en un centro de rehabilitación aquí en lo que llaman la Negra Hipólita… en la Negra Hipólita en El Peñón… tuve un gran tiempo ahí metío por medio de la droga… me dieron dos… me dieron tres, tres paros respiratorios por estar fumando droga… dejé la droga por esto… dejé el licor, no bebo, ningún vicio, el único vicio que tengo es el del cigarro y comer, más nada… porque ya la droga, para mí no es ningún bienestar para nadie, no se lo aconsejo a nadie… aquella gente que estén así… como andaba yo, en mi vida… que tomen en cuenta estas cosas… como la viví yo… que no la vivan ellos porque… no es muy justo que uno pierda a su familia, pierda todo, por medio de la droga… como llegué yo a perder a mi familia, por medio de la droga estuve en una prisión, perdí a mi mamá… en una cárcel… inocentemente, no me habían dicho nada y cuando salí de la prisión me dicen que mi mamá se había muerto, ¿por qué no me lo dijeron en la cárcel?, porque… me tenían bajo engaño… y… y ese es mi dolor, que cargo yo… con mi familia… ellos me verán así… pero no… pero yo vivo dolido con ellos porque ellos me engañaron a mí… desde el año 1994… el 13 de mayo, el 12 de mayo fue el día de las madres y el 13 de mayo me vine yo en libertad… preguntando por mi mamá… y me tenían engañao… no que se había ido pa que mi hermana… yo estaba en la cárcel… ta bien… como a los dos días me dijieron, mira que mami está muerta y me llevaron al cementerio después pa ver si era verdad… pa yo asegurarme… si era verdad… me aseguré… bueno, porque vi la foto de ella… y por eso es que no tengo familia, vivo solo… en mi ca… en mi rancho… sin ayuda de nadie… le doy las gracias a la gente de los apartamentos que siempre me ha ayudao…

López: ¿Cómo te sentiste la primera vez que te llevaron preso?

Pico: Mal… mal. La segunda vez mal… la tercera vez peor, peor… peor, porque… aguanté bastantes cosas… maltrato… hambre… necesidad… viendo masacre… viendo muerto… viendo cosas terribles… tremendas que uno no puede… que uno no puede… malignas… cosas malignas… de maltrato a los mismos compañeros de uno… las mismas gu… los mismos gobierno que agarran a uno y los golpiaban… le caían a pataá y coñazo… le caían a la gente y le quitaban la comida que le llevaban a los muchachos para el suelo, le caían a plan, le botaba la ropa, le robaban… le quitaban los útiles personales… Son cosas que yo viví… que no… que me quedó de ejemplo, que dije, que yo más nunca en mi vida… gracias a dios que del año 1994 no caigo preso… no sé lo que es caer preso y aquí le digo a mi gente también que tomen en cuenta esto para que no caiga tampoco, porque no es muy bueno estar preso. Ve como perdí yo a mi mamá, desde esa vez le prometía mi mamá en el cementerio que no caía más preso… que no me voy a meter con nadie ni voy a robar a nadie… ma… lástimamente que me monté en una moto y quedé incapacitado… y quedé inútil… con el femur y la cintura partido… no me operaron porque no tenía nadie quien me ayudara… el hospital pidió una prótesis a PDVSA que cuesta 150 millones pa que me operara y no me quisieron ayudar y no me la dieron, ve la fecha que estamos, el año en que estamos y no me han puesto la prótesis… no me operaron… no tengo cita pa un hospital… no tengo nada pa un médico porque no tengo ni quien me ayude ni quien me vaya conmigo a un hospital… que me la mueva… ¿cómo hago yo, pues?... solo, de los bloque a mi casa… a los ranchos… de mi casa a los ranchos… de mi casa a los bloques y a los ranchos y aguantar el dolor… nada más y a martillar a quien encuentre y pedir pa comprar mi pastilla…

López: ¿Siempre fuiste a la cárcel de Cumaná?, o ¿te llevaron a alguna otra?

Pico: No… siempre estuve preso en esta nada más… en esta nada más…

López: Y en la celda, ¿cuántos presos estaban?

Pico: Habíamos 64 ó 50… metían… depende, porque sacaban y metían…

López: ¿En un solo cuarto?

Pico: Sí, en un solo calabozo… y onde nos corren los gusanos por… por el suelo… comíamos auguyama con sardina… unas salao… pura auguyama con sardina salao… la sopa de allá era puro arroz con sardina, arroz con sardina ahí… comía eh… eh… loco… y había que comérsela porque uno en verdad no tenía quien le lleve un bocao de comida, uno tenía que comerse esa comida pues… porque en verdad uno tenía que comerse esa comida de un día pa otro porque tenía que comerse esa comía recalentá… porque no tenía un nadie que le llevase un pan pa su casa, pa la policía ni pa la cárcel… ¡y como yo no tenía nadie que me llevara!… yo tenía que comerme esa comida… porque no tenía ayuda de que me fueran a llevar un pan… una visita… vendé droga en una cárcel… pa podé sobrevivir… pa podé compráme unos zapatos, unos pantalón, una camisa porque no tenía… ¿Cómo comprarme un pantalón yo…?

López ¿Dentro de la misma cárcel?

Pico: Dentro de la misma cárcel… entonces yo tenía que venderle drogas a otros tipos más… dispuesto a que me agarrara por la guardia y me cayera a coñazo por esa broma y no sea nada mía, pero tenía que hacerlo por necesidad, porque me hacía falta pa tener lo mío, mi pasta, mi desodorante, mi champú, mi jabón, porque no le podía pedir a otro más, porque si le pido a otro más, entonces viene otro más y me pide culo entonces va a ser peor porque va a ser una masacre… porque yo lo puedo matar o el me puede matar a mí… nada más por esas palabras… entonces yo vendía mi droga y compraba mi… mi broma con esa droga que me daba para vender y yo le entregaba los reales al señor… pero me dejé de eso desde que salí de la cárcel… gracias a dios… le prometí a mi mamá… le prometí, le vuelvo a comprometer… que donde sea le dije a ella que yo no me meto más en problemas con nadie… pobremente, vivo como pueda… y gracias a una señora de los apartamentos que me ha ayudado con las muletas… me ha regalado dos par de muletas… señora Sairis… que me ha regalado dos par de muletas ya… que desde que vive en el bloque este de ¿aquí? (señalando la parte de atrás del lugar donde nos encontramos).

López: 5…

Pico: 5… sí, el bloque 5… en planta baja… ella me regalo las muletas… vive en el 5… (Los edificios en Super Bloques están numerados a partir del número 49).

Pico: Gracias a ella, gracias a dios que ella me dio una ayuda… gracias a la gente de los apartamentos que siempre me dan… cosas para mi tratamiento médico…

López: La gente de los Super Bloques debido a tu condición ¿cómo te tratan?, ¿bien o mal?

Pico: Algunos bien, algunos mal, pero no ninguna diferencia porque todos para mí son iguales… yo los tomo en cuenta a todos por igualito… porque hay unos coño e madres que no le dan a uno ni pa un pan… no le regalan a uno… bueno, más que todo los de los negocios… estoy agradecido porque sí me dan… que si los panes, Vitico, el de la panadería, me da los panes… David, me da la patilla, me da los huevos, me da la vitualla, me regala todo, me da real, me da pa la pastilla… el supermercado del señor Freddy, también… el del kiosquito 44… la gente de los apartamentos me regala los zapatos, las camisas, los pantalones, las comidas… que si Pico ven a comer… Pico aquello, Pico esto… ahorita no puedo subir a un apartamento a botar un escombro… a trabajar como hacía antes porque no puedo, porque no puedo subir… escaleras… tengo que caminar con muletas… vivo solo en un piaso e cama sin colchón… en un cartón… yo le digo a mis compañeros que dejen el vicio de las drogas… yo andaba en las drogas… … yo andaba en las drogas… a mí lo que me echó a perder fue la droga… la pandilla… la juntilla, mi hermano… ya yo recapacité… ya yo pensé las cosas… ya yo maduré… desde que mi mamá se murió… yo maduré, yo, ya he pensado ya… no caigo preso desde esa vez… no caigo preso desde el 94… del 94 no caigo preso… desde el año 1994 no sé lo que es caer preso… ni por pelea, ni por discusión, ni por nada… porque no tengo a nadie a mi lado que me ayude, que me apoye… no me podían ir a ver a un hospital, contimás, ¿me van a apoyar preso?, por sinverguenzura… no...

José Ramón Blanco, Pico, con voz ronca, repite una y otra vez su historia. Mientras cuenta, la lluvia nos sorprende sentados en el muro bajo de la calle principal de Súper Bloques. Nos despedimos con un apretón de manos. Camina, ayudado por las muletas, hacia su casa; le espera el cartón, el frío y la soledad, como a tantos, que se deslizan cada día y cada noche, entre nosotros y nuestras casas. La vida del malandro, del drogadicto, de la prostituta, si sobrevive los cuarenta, se convierte en un vagar de aquí para allá entre la miseria y la limosna.

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