Definitivamente estoy ubicado en el grupo de los sentimentalistas. A pesar de que me considero una persona que ha adquirido conocimientos importantes a lo largo de mi vida, muchas de las decisiones han sido basadas en lo que el corazón dicta.

El ser de esa manera me ha permitido experimentar muchas cosas que han sido positivas en mi vida. Una es mi participación en el mundo del arte dramático experimentado como actor de teatro.

El ser una persona sentimentalista me ha permitido tener una imaginación bastante creativa y grande, así lo considero yo, que me ha permitido experimentar en la creación de cuentos e historias que entran dentro de lo aceptable.

No soy un J.R.R. Tolkien o un Edgar Allan Poe, pero creo que me defiendo bien.

Eso sí, el ser como soy no es algo que me lleve a tener una vida color de rosa. Son muchas las decisiones erradas que he tomado por no tomar en cuenta lo intelectual a la hora de evaluarlas.

Daré un ejemplo que se puede considerar sencillo o banal, pero que sirve para dar una muestra de cómo muchas veces mis decisiones se basan en algo sentimental.

Para aquellos que han leídos mis publicaciones anteriores, deben de saber que soy muy seguidor del Futbol. El deporte rey es una pasión para mí. Dentro de este amplio mundo bastante criticado, existe un club que puedo considerar el de mis amores: FC Barcelona.

Me considero Culé de corazón y sigo al club en las buenas y en las malas. Considero que así debe ser. Ahora bien, traigo este tema como ejemplo ya que el próximo domingo se juega el clásico de la Liga Española de Futbol donde se enfrentan el club azulgrana contra su eterno rival el Real Madrid.

Asumiendo un papel de apostador, algo que no soy ya que nunca tengo suerte en los concurso o apuestas, existen dos opciones para tomar una decisión que podría clasificarse como certera. Esto desde mi punto de vista como seguidor azulgrana.

Intelectual:

Si tomamos en cuenta la calidad de juego de ambos clubes, el momento anímico por el que pasa cada uno, los merengues motivados por haber pasado a las semifinales de la Liga de Campeones de la UEFA y los azulgranas desmotivados por ser eliminados de la misma competición, los planteamientos tácticos de cada club, la proyección que llevan en el campeonato español en esta temporada, entre muchas cosas, lo lógico sería ponerle las fichitas al club blanco.

Sentimentalista:

Tendría que pasar una hecatombe nuclear para que realice cualquier apuesta en donde de como ganador al Real Madrid. Es allí donde tomo una de dos decisiones básicas. O no hago ninguna apuesta si considero que las estadísticas dictan que podríamos perder, o simplemente, le voy con todo al club de mis amores, sin importar un posible resultado negativo y la perdida de la apuesta.

Creo que es un claro ejemplo de toma de decisión basada en lo intelectual o sentimental basado en mis pensamientos y sin tomar en cuenta el logro de un balance en donde se pueda llegar a una conclusión favorable.