Pues sí, esta historia de amor que me ha regalado la vida tiene nombre y apellido: Jhoxiris Medina Alvarez, mejor conocida como La Corderita Jmmm... A diferencia de muchas personas, no recuerdo el día exacto en la conocí, ni cuales fueron las primeras palabras que compartí con ella, simplemente ella era una cantante más del coro más fabuloso que había escuchado hasta entonces, al cual acudía fielmente todos los días, ya que la música y especialmente el canto, eran lo más importante para mí.

Pero la fuerza del destino siempre estuvo jugando a mi favor, aunque yo aún no lo sabía... Desde hace algunos años, aproximadamente desde el 2005, caí en una extraña superstición creada por mí mismo de que siempre he tenido un año bueno y un año malo. Así que se podrán imaginar el miedo que sentía cada 31 de diciembre del supuesto año bueno, jeje; el caso es que el 2012 fue uno de los mejores años mi vida y hasta hace poco pensaba que el 2013 había sido uno de los castigos más grandes que Dios podría mandarme. Pero por otro lado, el 2013 me regaló a Jhoxiris y hasta ahora es que vengo aterrizando en el hecho de que ese año de tanto sin sabores fue el inicio de la construcción de lo más grande y hermoso que he podido experimentar en la vida... "El Amor"

Recuerdo que transcurría el mes de febrero del año 2013, y en la sede principal ubicada en Caracas de nuestra institución musical se estaba preparando un gran evento en homenaje al Quinteto Contrapunto (grandes exponentes musicales del folclore venezolano), donde debían participar representantes de todos los estados de Venezuela. Para ese evento yo me preparé con mis mejores amigos, pero Jhoxiris hizo lo mismo con sus amigos, y otros amigos de nosotros hicieron lo mismo con otros amigos; el caso es que eran demasiados quintetos, pero por nuestro Estado Aragua solo debían participar cinco personas... Una soprano, una contralto, un tenor, un barítono y un bajo.

Nuestra directora decidió que lo más conveniente era realizar una audición de todas las agrupaciones para escoger solo una que pueda representar a nuestro estado. Como siempre, me lancé de primero con mis amigos para esa audición; recuerdo que di lo mejor de mí porque deseaba participar en ese evento con todas las fuerzas de mi corazón (recuerden que era mi año malo y necesitaba algo bueno que lo salvara). Luego pasaron los quintetos de en medio y por ultimo pasó la agrupación de Jhoxiris, cantando una de las canciones venezolanas más hermosas que existe y sobresaliendo con ese algo que me hizo saber desde ese momento que yo tenía que ser parte de su vida... Ese algo es su voz... Esa canción es Playa Grande...