Sintiéndose Joven

Se es joven por los ideales, por los hechos del día a día que encaminan a una mejor convivencia, ya sea entre amigos o en familia y mejor aún, actos que ayuden a la sociedad en general. Los jóvenes son los que han iniciado movimientos que terminaron transformado a la humanidad. No es necesario ver la edad de las personas activas y siempre dispuestas a integrarse o a servir; lo verdaderamente importante -decía el abuelo- es comprender el valor de la cooperación genuina; veamos dos sencillos ejemplos:

Algunos animales son lo bastante arriesgados para conseguir alimento para todos los presentes; el instinto natural de sobrevivencia les lleva a actuar en total desapego; mientras que algunos seres humanos que no han superado el egocentrismo, no logran desarrollar el cooperativismo, esencial en tiempos de escasez.

Imagínese a un grupo de muchachos que necesitan entrar a un parque temático para realizar una investigación; al encontrar la puerta cerrada inician una bella labor de cooperación, donde finalmente todos logran escalar la enorme puerta.

Acuérdate muchacho -decía el abuelo de la playa- de la palabra sagrada “Mejor es dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero, ¡ay del solo! Que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; más ¿Cómo se calentará uno solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe fácilmente”

Para sentirse joven y útil, sólo se trata de actuar con la actitud óptima de querer integrarse, con la disposición desapegada en beneficio de todos. Los grandes triunfos y aportes de los jóvenes, los han conseguido en equipo alegre, unido, respetuoso y disciplinado.