Padres, como nos construyen.

Hoy me he sentado a escribir
De una manera especial
Un motivo llega a mí
y lo voy a dedicar.

A quien más podría ser
No tengo mejor razón.
Esta tan cerca su día
Y que mejor ocasión.

Primero quiero decirte
Y eso me llena de orgullo
Medio yo te pertenezco
Y mi corazón es tuyo.

Sin embargo ya lo entiendo
tuvo que pasar el tiempo
para poder entender
ese aprendizaje eterno

No te hizo falta asistir
A las mejores escuelas
Para dejar en nosotros
Tus inolvidables huellas
huellas que siguen guiando
nuestro largo caminar
y nos sirven de refuerzo
para la vida enfrentar

La naturaleza y Dios
Siempre llenaron tus hechos
Trasmitiéndole a nosotros
Sacando el mejor provecho.

Supimos amar a Dios
a través de tus acciones
llenaste de mucha fe
todos nuestros corazones

La Agricultura y la cría
nos enseñaste a diario
Dios sabe cuánto admiramos
Ese precioso legado.

Tú preocupación primera
Nuestro futuro formar
Con el trabajo y la siembra
Nuestra formación lograr.

Cada uno de nosotros
quienes tuvimos la suerte
de ser tus hijos e hijas
queremos agradecerte.

Y en todas nuestros hogares
por siempre está tu recuerdo
en cada mata sembrada
en nuestros pequeños huertos

Queremos que nuestros hijos
esos, tus queridos nietos
conserven tus enseñanzas
a través de maestros hechos.

Nos trasmitiste tus fuerzas
y tú inmensa valentía
llenándose nuestras vidas
con cosas de gran valía.

Que más honor que rendirte
este homenaje papá
y estoy seguro que siempre
con Dios nos sabrás cuidar.

Cuando me enfrentó a la vida
y se me llena de sombras
solo invoco tu recuerdo
y tú espíritu me nombra.

Por todo padre querido
la grandeza que mostraste
el gran señor de los cielos
nunca nos hará olvidarte.

A ti mi eterno papá
y por mi Dios bendecido
recibe estos tiernos versos
de tú hija agradecida.