Concurso de Arte y Escritura #117 y Ganadores de la Edición #116/ Art and Writing Contest #117
La Plaza de mi Pueblo
Hoy se escribió un nuevo relato, se trata de La señora Prudencia, una viuda que llegó apenas hace unos días y por fin hoy se hizo sentir para dejar su historia grabada en los árboles y sus pisadas en las aceras. Las chismosas estaba desesperadas por saber de Prudencia, pero ella permaneció encerrada en casa estos dos días, así que hoy, Prudencia es noticia.
La plaza la recibió con su colorido vestuario, blusa roja, falda naranja y zapatos negros de tacón, tenía en sus manos un bolso moderno que según Clarisa, debe haberle costado un ojo de la cara, a lo cual respondió Paula, ¡uuifff!… pero es bellísimo, Leída por su parte no dejó de decir toda la tarde, “quiero uno…quiero uno”, jejeje … ella siempre de envidiosa.
La viudita, no dejo de observar cada detalle de la plaza, con su tongoneo en zigzag, la señora Cleotilde, estaba furiosa porque su anciano esposo no dejaba de mirarla. Ese día, se apareció también Lourdes con su pequeño Alberto, como siempre, tan apurada como alma en pena.
Quise despertar a al señor Ignacio que se quedó dormido en el banco, estaba tan cansado de reparar zapatos toda la tarde, tomó unas cervecitas y “adiós luz que te apagaste”, sus amigos me espantaron… ¡deja dormir al viejo no seas tan verrenchuda!, así que sacudí mis zapatos y seguí de largo.
Cuando me despedía de mi pequeña plaza pueblina, me di cuenta que Leidi, estaba jugando sola en la fuente, por un momento pensé, ¡solo tiene 3 años!, pero recordé la sacudida que recibí por querer despertar al zapatero, así que, giré mi mirada lejos de su padre, quien era el policía del pueblo, conversaba con su esposa tranquilamente como si nada, pensé, si a ellos no le importa porque yo tendría que preocuparme, por fin, llegue a casa después de leer el relato que la plaza me dejaba esa tarde.
De repente, sonó una ambulancia, eran las chismosas Leída, Clarisa y Paula, con el último relato de la tarde … la pequeña Leidi, sufrió un accidente, se cayó de la fuente y se golpeó muy fuertemente la cabeza, ¡wuaoooo… no puede ser!, puede haber evitado este gran daño. Definitivamente, mi plaza escribió otra página, esta vez una historia triste “no se que piensan ustedes pero… ser entrepito no siempre está mal**.
Upvoted. Thank You for sending some of your rewards to @null. It will make Steem stronger.