Este día ha sido muy especial para mi, este día nos vinimos mi hijo y yo a casa de mi mamá, a quedarnos hasta mañana. Mi hija mayor vive acá con mi mamá y decidimos pasar estos días juntos, además que por la cuarentena hacía mucho que no pasamos un espacio prolongado unidos.

Fue un día bastante productivo ya que lo dedicamos a organizar varias actividades que ella tenía pendiente, entre esas realizar un calendario para en el inicio de clases ya pueda ir planificando mejor la realización de sus labores académicas. Mi hija mayor desde pequeña tiene dificultades de aprendizaje, y aunque ha aprendido a controlarlo y a superado en gran medida estas dificultades, pues aún necesita ciertos apoyos, y organizarse adecuadamente.

A parte de esta planificación con mi hija, realice un esquema de deberes en el hogar, al cual llegamos en consenso, para que así se vayan reforzando hábitos. Además que mi mamá requiere más apoyo y ellas viven solas.

En este día estuve dedicada a mis hijos, porque con el niño hoy trabajamos dibujo libre, pintando con temperas. Así como estuve realizando unas fichas para utilizarlas de estrategia en el aprendizaje de sílabas y formación de palabras.

En sí este día me llenó de satisfacciones, definitivamente el tiempo que se dedica a los hijos, ese tiempo de calidad donde se comparte con ellos, se les estimula, se les escucha y se les da amor, eso no tiene precio, favorece a una mente sana y se convierten en jóvenes más estables y abiertos.

Hoy disfrute mi día entre las conversaciones de una adolescente y los juegos de un preescolar. Lo que pude evidenciar es que esta generación es tecnológica, mi hija me enseño programas que no conocía y mi hijo me enseño a jugar roblox y yo le enseñe a jugar Mario Bross.

Los padres somos responsables de estos momentos en su crecimiento y hay que aprovecharlos al máximo porque crecen rápido y en un abrir y cerrar de ojos serán adultos ocupados con los quehaceres de la vida.

También dedique tiempo a consentir a mi mamá, porque hay que disfrutarnos en vida y no extrañarnos cuando no se puede volver atrás, le cocine, le limpie su apartamento como le gusta y la cuide un rato de sus dolencias de salud.