Hoy es un excelente día, les cuento que nos quedamos dormidas, abriendo los ojos a las 8:20am, glorificada, teníamos muchas muchas noches sin dormir, mi gordita paso la noche sin fiebre gracias a Dios, durmió, no hubo presencia de dolor en la mano donde tiene la celulitis, a Dios gracias, nos trajeron desayuno y fue así que nos despertamos, posterior a nuestro aseo, procedimos a desayunar y esperar nuestra rutina aquí en la habitación.

Confiando en Dios que mi colega tratante tome conducta, estamos viendo televisión, leyendo la Biblia por el teléfono, unos salmos y oraciones que nos envió la amiga de ambas @annym, y dibujando unas hermosas etiquetas, repasamos la tabla de multiplicar, y si nos egresan el día de hoy, ya contamos a la mano con el tratamiento de continuación vía oral.

Hoy nos llegó una grata visita, "abuelita", mi mamá quien estaba muy angustiada del no poder ver a su nieta, y que la extrañaba en nuestro hogar.

Reflexionando y conversando con mi hija que somos una familia super bendecida, que contamos con personas maravillosas a nuestro alrededor que nos brindaron manos amigas.

También tenemos la fe y certeza que Dios no nos suelta, que aunque me sentí con el alma destrozada nunca deje de clamar a Dios, de igual manera la familia, amigos y los papás de mis pacientes que se han convertido también en grandes amigos.

Debemos cuidarnos en estos momentos mucho más que antes, no bajar la guardia, Tanto el covid-19 como el dengue hacen estragos a diario, es lo que más se está viendo llegar a las emergencias de los centros asistenciales, de echo anoche en dónde tengo a mi hija hospitalizada llegó una lactante de 9 meses de vida con dengue hemorragico en condiciones de cuidado!.