Nuevamente compartiendo mi día a día en la cocina después de un domingo de descanso de los fogones, agradecida con Dios y con la vida por permitirme respirar un nuevo día.
Mi día comenzó con un rico café a las 8:30 am, que acompañé con un trozo de budín de cambur que hizo mi hija el día de ayer. Hay días que no me apetece ver la cocina y, por lo general, el día domingo me desentiendo de ella y mi hija menor me sustituye.
Este budín quedó super rico y como quedó suficiente decidí desayunar con una pequeña ración para comenzar las actividades del día.

Una vez terminadas las labores de aseo de la casa me puse nuevamente manos a las ollas para la elaboración de un sopita de pollo que ya el cuerpo nos está pidiendo. Aún quedan secuelas de la gripe, que también mi hija menor se contagió. Nada mejor que un buen caldo de pollo para reponer esas defensas.

Para esta sopa utilicé prácticamente un pollo entero, solo extraje la pechuga que reservé para otra comida. 1 1/2 kg de verduras (yuca, auyama, ocumo blanco y chino), cebollas, ajos y ajíes dulce. Un sobre de Sopa de fideos Maggi, 20 gr de fideos adicional, perejil, sal, orégano y pimienta al gusto.

Siempre me ha gustado condimentar la sopa de pollo con estos sobre de sopa de fideos de Maggi porque le dan muy buen sabor a las sopas, especialmente a la de pollo.

Esta sopa tiene un costo aproximado de 6$ y rinde para 6 platos bien colmados de sopa.

La sopa de pollo es una de mis favoritas porque es mu fácil de hacer. Una vez que tenemos los aliños (cebollas, ajos y ajíes) lavados y picados y las verduras (ocumos, yuca, auyama) lavados y picados, lo primero que haremos será procesar los aliños en una licuadora o picarlos en cuadros bien pequeños y sofreímos con un poquito de aceite y agregamos la sal, la pimienta y el orégano.
Luego agregamos las piezas de pollo, removemos y tapamos para que el pollo absorba todos los sabores de los condimentos y aliños.
Estes es uno de los procesos que considero más importante en la elaboración de la sopa de pollo porque permite que el pollo quede muy gustoso una vez que se ha realizado la sopa.

Cuando el pollo ya esté cocido agregamos suficiente agua hasta cubrir el pollo y un poco más, cuando rompa el hervor colocamos las verduras que ya tenemos previamente lavadas y picadas. Dejamos que rompa nuevamente el hervor y agregamos la sopa de fideos Maggi y un poco de fideos adicionales y dejamos hervir hasta que la verdura esté blanda.

Cuando hemos comprobado que la verdura está blanda agregamos el perejil y un poco de onoto en polvo para darle un poco de color al caldo. Dejamos cocinar 5 minutos más y listo.
Apagamos y servimos bien caliente.

Con esta sopita de pollo volvemos a la vida. Es muy reconfortante para después de pasar por una fuerte gripe como las que nos contagiamos.
Quedó muy rica.

En mi nevera casi nunca falta la mermelada de guayaba. En el patio de mi casa tengo una planta que me regala su fruto gran parte del año y con él, hago jugos y mermeladas para merendar o para la realización de algún postre. Con la escasez de gas doméstico, algunas veces me limito a prepararla ya que su cocción es de aproximadamente 1 hora.
Para la mermelada sólo necesitamos guayabas (1 kg), azúcar (700 gr) agua y gas.
Licuamos las guayabas con poca agua, colamos y llevamos al fuego con el azúcar hasta conseguir el punto deseado, que no es más que cuando pasamos la paleta por el fondo de la olla y se abre un espacio suficiente para ver el fondo de la olla.
Con esta preparación se obtienen 700 gr de mermelada de guayaba, suficiente para varias meriendas.

Para la cena no me destaqué mucho porque con la merienda no teníamos mucha hambre. Así que sólo tosté unas rebanadas de pan y las comimos con una salsa tártara, que en otra oportunidad les mostraré como la preparo.
De esta manera me despido hasta un nuevo día, lleno de deliciosos aromas y sabores que se destilan desde los fogones.
Dando gracias Dios siempre, por los alimentos que ingerimos en nuestro hogar y rogando que en ningún hogar del mundo falten.