Como todo lanzador latinoamericano, su velocidad en sus lanzamientos era determinante en sus presentaciones, su deseo siempre fue triunfar en las grandes ligas, desde sus inicios con el equipo de los Dodgers de los Angeles junto a su hermano Ramón Martínez siempre demostró sus atributos desde el montículo, sus inicios fueron acompañados bajo la tutela de su hermano, quienes para muchos era un gran lanzador, resultando ser el mejor que su hermano, convirtiéndose así en lanzador mejor constituido que Ramón, superando de esta manera al maestro. Todo seria mas grande cuando pasa al equipo de los Expos de Montreal, en donde fue que exploto su talento como lanzador, al reunir varias temporadas con mas de 200 ponches, y la temporada en donde exploto, en la de 1997 en donde poncho a 305 contrarios, que fue lo que le valió su llegada a un equipo competitivo como los Medias Rojas de Boston en la temporada de 1998.

Esos 305 ponches aunque no fueron los mejores en esa temporada con respecto estadísticas, porque esos 305 ponches solo lo llevaron a llegar de segundo en esa estadística, significaron que el equipo de Los Medias Rojas de Boston se fijara en el, equipo con quien vive nuevas experiencias, asiste a varias post-temporadas y llega a alcanzar lo que todo jugador quiere, llegar hasta la Serie Mundial y ganarla. sus magníficos números también los lleva la mencionada post-temporada, con sus actuaciones desde el montículo, junto a los de sus compañeros llevan a destronar en la temporada de 2004 a los Yankees de Nueva York, en la famosa serie por el campeonato de la Liga Americana de esa temporada en donde después de estar abajo 0-3 logran remontarla y ganarla para así llegar a la Serie Mundial frente al conjunto de los Cardenales de San Louis y ganarla 4 juegos contra 0. Aunque no fue participe de las siguientes victorias del equipo de los Medias Rojas de Boston en las temporadas sub-siguientes dejo una huella imborrable junto a varios de sus compañeros.