Concurso Cotina Edición Halloween: Relatos cortos de terror

En una tarde de Halloween fui a un local de la ciudad para realizar unas compras y al llegar al lugar, todo parecía normal.

En eso que estoy realizando las compras me consigo con una amiga que tenía años sin ver y nos pusimos a conversar de todo un poco.

Les confieso fue un grato encuentro ya que era una persona bastante apreciada, solo que con el pasar del tiempo cada una fue tomando su propio camino y las responsabilidades diarias hicieron que se perdiera ese contacto de amigas de años.

Yo si observaba que mientras pasaba el tiempo y yo hablaba amenamente con mi amiga, la personas que se encontraban en el local se nos quedaban viendo extraño.

Igual les ignoraba y seguíamos hablando, mi amiga hablaba tan contenta y le sentí como una paz en su expresar, que la verdad me lleno de mucha satisfacción ya que cuando estudiábamos ella vivía bastante agitada, con el tema de los conflictos familiares.

Al rato llega otra amiga común y me saluda, pero si note que a la otra amiga ni se preocupó en saludarla, cosa me extrañó bastante porque todas éramos un grupo bastante unido.

Al poco tiempo de conversar yo le digo a la amiga que llegó de última que porque no saluda y ella me dice: Claro que te saludé, no recuerdas?

Y yo le dije claro que recuerdo pero estás ignorando a la amiga que tenemos aquí en frente y está al verme hace una cara de sorprendida, ya que a nuestro alrededor no se encontraba nadie.

Al ella hacerme caer en cuenta de lo que me estaba diciendo, yo opte por decirle a mi amiga que estaba loca y que era una falta de respeto, a lo que se acerca una vendedora que escucha nuestra conversación y pide permiso para confirmar lo que mi amiga me estaba diciendo.

La vendedora dijo que ella llevaba rato observándome porque veía que yo estaba hablando sola y hasta me llevaron a ver los vídeos que quedaron reflejados en las cámaras del local.

Efectivamente se observaba mi persona allí en el local hablando, más no se veía mi otra amiga.

Como se podrán imaginar se me bajo hasta la presión.

Una vez que me recupere le comento a mi amiga lo que había hablado con mi otra amiga y ella me comenta que ya ella tenía más de cinco años que había fallecido.

Y claro por haber perdido comunicación no me habían podido avisar.

Se podrán imaginar lo fuerte que fue ese momento para mi, así que con todo lo ocurrido ni compré las cosas que iba a buscar y me fui del local en compañía de mi otra amiga; es decir la que estaba viva.

Cuando salimos del local había un muñeco alusivo a la noche Halloween y se reía horrible.