¿Cómo están todas, mis amigas latinas?

Que tengan buena salud y que la prosperidad las acompañe.

¡Amén!

Amigas, como siempre, esta noche quiero compartir algunas fotos o historias de mi día a día, que corresponde al 11 de noviembre de 2025, para ser exactos, martes.

Este es nuestro enésimo día de regreso en la comunidad latina. No he estado activa en esta comunidad durante varios meses, así que esta es mi cuarta semana publicando con regularidad.

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Como siempre, comencemos mi historia desde esta mañana. Esta mañana estoy de vuelta en acción. Esta mañana, mi colega y yo fuimos a trabajar instalando un techo de acero.

Mi lugar de trabajo esta vez fue Gampong Blang Puntet, donde la casa en la que estábamos trabajando era una vivienda social distribuida por el gobierno de Aceh. Era la primera vez que trabajábamos con este jefe local, a quien no conocíamos. Así que, al acercarnos al lugar, lo esperamos en la intersección, tal como nos indicó.

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Mientras lo esperábamos, pensé en tomar una foto de la intersección para usarla como la primera imagen de mi publicación.

Como no tuve tiempo para una selfie por la mañana, me tomé una al llegar a la casa en la que estábamos trabajando. Así es como se veía la casa hoy.

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Esta mañana hacía mucho calor y estábamos agotados después de trabajar todo el día. El calor nos obligó a beber agua para refrescarnos. Ya habíamos comprado suficiente agua para la obra.

Sin embargo, debido al calor extremo, se nos acabó el agua que habíamos comprado porque habíamos bebido muchísimo. Así que, a las 4 de la tarde, volvimos a tener sed. Nos habíamos quedado sin agua, así que me tocó comprar más. Desafortunadamente, cuando llegué a la tienda, me sorprendió un aguacero que me impidió regresar al trabajo.

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El aguacero fue tan fuerte que no pudimos seguir trabajando porque ya era hora de irnos a casa. Debido a la intensa lluvia, se cortó la luz, quizás por nuestra seguridad, y el equipo de la compañía eléctrica la apagó.

Cuando llegué a casa, ya estaba anocheciendo porque el lugar de trabajo quedaba bastante lejos, así que tardamos una hora en llegar. Una vez en casa, tomé otra foto para mostrar el final de mi jornada.

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Esa noche, mi amigo y yo fuimos a ver a mi antiguo jefe, quien fue mi primer mentor en el mundo laboral. Él fue quien me dio clases en mi primer día de trabajo.

En ese momento, me encontré con mi jefe y un compañero de mi mismo pueblo. Fuimos juntos porque no podía ir solo debido a la distancia entre el punto de encuentro y yo.

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Nos encontramos en un lugar donde suelo reunirme con mis compañeros. Este lugar es un punto intermedio entre mi jefe y yo. Por eso, lo invité a vernos en mi sitio habitual.

Todas las fotos de esta publicación fueron tomadas con mi teléfono personal, un Poco.

Con esto concluye nuestra breve historia sobre nuestro día a día. Espero que mis amigas latinas me disculpen por cualquier error de redacción.

Saludos, @rizalpratama.