Hola muy buenas tardes amigos de esta hermosa comunidad, dándole gracias a Dios por el aire que respiramos cada día, gracias por lo bueno y lo malo de la vida, con la mejor disposición hoy me encuentro nuevamente entre ustedes mis amigos.

Acá estoy para contarles un poco sobre el encuentro con nuestros familiares habitantes por muchísimos años del estado Monagas, linda Barrancas del Orinoco, desde que murió la abuela, nada ha vuelto a ser igual, aquellas visitas frecuentes ya no las hacemos, se siente un vacío grande y definitivamente ya nada es igual, pero aun así regresamos en fin de semana de visita a nuestros tíos y primos.

Les cuento que la casa esta ubicada a orillas del río Caroni, el agua en esta crecida llegó a escasos metros de la puerta trasera de la casa, imagínense que la tía cuenta que se podían sentar en la puerta del fondo de la casa y pescar. En fin mis amigos es una belleza natural , mirar el río crecido metido en el patio de la casa.

Era día sábado y decidimos viajar hasta el estado Anzoategui en busca de combustible, al llegar allá fuimos a la casa de unos familiares que obviamente residen allá y le compramos gasolina, ya a las 10 de la mañana de regreso a casa , decidimos irnos al estado Monagas, gracias a Dios teníamos suficiente gasolina.

Todo iba muy bien, primera vez que nos íbamos desde el tigre a Barrancas, pues que creen? Nos perdimos , preguntamos a un señor para que nos ubicara y fue peor la cosa, nos metimos por caminos que nos desviaron 2 horas mas , después de tanto nos ubicamos y volvimos nuevamente a la vía que nos llevaría a Barrancas del Orinoco.

Finalmente a las 2 de la tarde fuimos llegando a nuestro destino cansados, agotados, enseguida nos esperaban con unos rayados y sin pensarlo mucho enseguida montaron la paila para freir, después de una gran perdida, fuimos recompensados con un banquete de rayado frito gracias a Dios.

Tíos y primos muy contentos por nuestra visita, allí debajo de las matas enseguida armaron un juego de truco todos contentos celebrando por nuestro encuentro.

Al llegar la noche , todos a descansar, algunos nos fuimos a casa de una de las primas para acomodarnos mejor.

El día siguiente al amanecer, prepararon desayuno y mas atrás la olla para un sancocho de cabeza de pescado, que emoción estar todos en familia disfrutando después de tanto tiempo.

Ya a la 1 de la tarde veníamos de vuelta a casa ya era domingo, al día siguiente había que trabajar, en 2 horas ya estábamos en casa gracias a Dios y a la virgen.