Prepararon rifles y comenzaron a dispararle.
Pero Dios nos dijo en la Biblia.
Así fue, antes de ti, a ti y después.
La miras y la metes más profundamente en el cuerpo de ese cuchillo demian.
Y luego por las tardes celebran.
Miedo a quemar el dolor feroz.
Cabaña de troncos de la casa corta.
Una ventisca en ríos sombríos,
Que la Tierra es para nosotros, Madre y Madre Hogar.
Su ira ha cambiado positivamente.
Y en el desierto y donde está el diluvio.
Solo que ahora me di cuenta de que en invierno das verano.
En su santo amor por ti.
Y en sus espaldas hay bailarinas de ballet.
Al igual que nuestro pájaro de raíz,
Y en las ventanas, como en lápidas de piedra.