Nutricionista oncológico: cuándo acudir y cómo puede ayudarte durante el tratamiento del cáncer

Recibir un diagnóstico de cáncer cambia la forma de ver la vida. Las prioridades se transforman, los hábitos se ajustan y la salud pasa a ocupar el centro de todo. En medio de tratamientos intensos, la alimentación suele quedar relegada a un segundo plano, aunque es uno de los pilares que más influye en la tolerancia, la energía y la recuperación. En este contexto, acudir a un nutricionista oncológico puede marcar una gran diferencia.

Este profesional no se limita a diseñar dietas. Evalúa tu estado nutricional, adapta los menús a cada fase del tratamiento y te ayuda a mantener la fuerza, las defensas y el bienestar. Pero, ¿cuándo es realmente necesario pedir una cita con un especialista en nutrición oncológica?

Momentos en los que un nutricionista oncológico es esencial

Desde el momento del diagnóstico, la nutrición juega un papel clave. Preparar al cuerpo para la quimioterapia o radioterapia ayuda a reducir los efectos secundarios y mejora la respuesta inmunológica. El acompañamiento nutricional también es fundamental si se presentan síntomas como pérdida de peso, fatiga, cambios en el gusto o dificultades digestivas.

Etapas en las que la alimentación marca la diferencia

• Antes del tratamiento: fortalecer el organismo y mantener reservas energéticas.
• Durante el tratamiento: aliviar efectos secundarios y prevenir desnutrición.
• Después del tratamiento: recuperar masa muscular, mejorar defensas y prevenir recaídas.

Cada fase requiere un enfoque nutricional diferente. El especialista ajusta la dieta según la evolución clínica, asegurando una alimentación equilibrada y adaptada a cada necesidad.

Señales que indican que necesitas apoyo nutricional

La pérdida de peso, el apetito reducido, los cambios digestivos o la debilidad son señales de alerta. En estos casos, la intervención temprana puede evitar complicaciones y mejorar la calidad de vida. Una dieta personalizada no solo nutre, sino que se convierte en una herramienta terapéutica para sobrellevar mejor el tratamiento.

Más allá de la alimentación: una estrategia integral

El nutricionista oncológico educa, acompaña y empodera al paciente. A través de pautas prácticas y personalizadas, ayuda a mantener un equilibrio que favorece la recuperación. Además, un plan adecuado mejora el bienestar emocional, ya que comer de forma adaptada devuelve sensación de control y seguridad.

Dónde encontrar asesoramiento especializado

Si vives en Santiago de Compostela y buscas orientación profesional, puedes consultar los servicios de nutrición oncológica en Oliver Nutrición Oncológica, un espacio dedicado al acompañamiento nutricional durante el cáncer.
También puedes conocer la ubicación y planificar tu visita aquí: Rúa do Valiño, 66, Baixo 4, 15707 Santiago de Compostela.

Acudir al nutricionista oncológico no solo significa mejorar la dieta, sino cuidar el cuerpo y la mente durante un proceso desafiante. Una alimentación guiada profesionalmente puede ser el mejor aliado para superar el cáncer con fuerza y esperanza.