BATIR FUGAZ (La imagen una fotografía del autor)

La infancia: ¿Quién lo diría? Ir a las fuentes, colocar barcos sobre ellas abriendo surcos de esperanza, de alegría; o ir al mar, bañarse en sus orillas, hacer con la arena cocodrilos sigilosos e inocentes; o estar escalando tepuyes entre cascadas admirables y flores exóticas que son la voz de la tierra que no conocíamos, que son parte de esa unidad fundamental que nació con nosotros en el poema:
En aras de predecir el mar
y cada ritmo silente de sus olas
acudo al batir fugaz de tus aplausos
En aras de ponerle coto a tus cortejos
y abrirle paso a la amistad antigua
acudo al batir fugaz de tus pies
sobre la arena
En aras de ser la unidad fundamental
el uno primordial de tu nacimiento
acudo al batir fugaz de tu alegría