Nuestros encuentros con la lectura tienen semejanzas, aunque por ser la mayor de los hermanos, no tenia quien me leyera, y en casa no había una nutrida biblioteca, pero recuerdo que mi padre cuando podía compraba revistas que traian como obsequio una edición económica de algunos clásicos de la literatura, que leí y guarde por algún tiempo, pero al ser elaborados con papel de mala calidad se fueron deteriorando, son pocos lo que se conservaron y aún tengo, entre ellos "Don Quijote". Te agradezco que tu lectura me haya traído esos recuerdos y me permita agradecer a mi padre, ya en otro plano, ese gesto que me inicio en esta apasionante aventura llamada "lectura". P.D: Tú libro menos favorito me sacó de muchos apuros, porque para los números, no soy buena para nada...