El misterio de las gemelas silenciosas
June y Jennifer mejor conocidas como ”Las gemelas silenciosas” nacieron el año de 1963 en barbados, ellas nacieron con 10 minutos de diferencia dejando como hermana menor a Jennifer. Desde su nacimiento tuvieron un vinculo increíble, no se separa en lo más mínimo. Las personas que las observaban y las que las conocían aseguraban que tenían gestos similares e incluso ademanes y hablaban de la misma manera.
En cuanto a sus padres, ellas eran hijas de Gloria y Abreuy Gibbons quienes también eran unos inmigrantes caribeños, siendo su madre una ama de casa y su padre un técnico de la Fuerza Aérea Británica.
A pesar de haber nacido en Barbados tuvieron que mudarse pronto a Inglaterra y fue ahí donde pasaron parte de su niñez hasta que su padre fue trasladado a Haverfordwest, una pequeña ciudad Galesa. Por lo tanto la familia debió mudarse junto a él. Esto se volvió un poco complicado pues eran una minoría ya que las personas de color no se veían en esta ciudad y ellos eran de los pocos que habitaban allí. Evidentemente como eran personas de color, las gemelas se sintieron rechazadas en la escuela. Pues esta época de los 60 era bastante difícil y aún todavía muy racista.
A las gemelas les hacían bullying en las clases y en los recreos, esto las llevó a centrarse sólo en ellas, a recluirse y a ser sólo ellas con ellas. Sin embargo, debido a las burlas de sus compañeros y a todo el bullying que les hicieron, los profesores llegaron a la conclusión que lo mejor que podían hacer simplemente era cambiarse de escuela.
En este momento la relación de las hermanas se volvió un poco extraña debido a todo lo que ellas habían vivido y a esta reclusión, ellas empezaron a crear un idioma para ellas mismas. Simplemente hablaban entre ellas, no mantenían conversación con otras personas a excepción de su hermana menor. Pero del resto era todo entre ellas y usaban su propio idioma para poderse entender entre ellas solamente.
Para determinar su conducta, a las gemelas se les hicieron varios exámenes psicológicos y porque de esto se volvieron un experimento fascinante para todos los psicólogos, pues determinaron que literalmente si una decidía lanzarse de una montaña, la otra lo haría también; era una relación tan estrecha que se volvía tan extraña a tal punto que podría considerarse demencial.
A la edad de 14 años debido a que las gemelas se seguían comunicando únicamente entre ellas, los padres decidieron que la solución sería enviarlas a escuelas diferentes, lo cual se convirtió en una de las peores decisiones ya que cuando las separaban, entraban en una especie de estado catatónico y comenzaban a hacerse daño o a querer hacer cosas en contra de su vida e incluso en esta separación, June intentó quitarse la vida por no estar al lado de su hermana en el colegio. Ella tenía un diario y escribió la frase: ”¿Debo ahogarme en la tina? ¿O más bien, conseguir un alfiler y clavármelo en el corazón”. Sin embargo no se logró suicidar pero esto es solo el comienzo de una vida bastante perturbada entre las dos.
Sus padres decidieron no separarlas más por su seguridad, y las dejaron juntas en la misma casa y no las llevaron más a la escuela sino que las empezaron a enseñar en casa prácticamente.
Ellas constantemente estaban aislándose en sus dormitorios, jugaban mucho a las muñecas y tenían un ritual muy aterrador en el que decidían cuál de las dos se iba a despertar primero en la mañana y la otra gemela no podía respirar hasta que la otra haya despertado y haya respirado por primera vez. Como esas, hicieron haciendo muchas cosas; creaban novelas en sus cabezas, hacían actos teatrales e incluso algunos los grababan en cintas de vídeos y de audios para regalárselas a su hermana.
Para la navidad de 1979 les regalaron unos diarios también se comunicaban a través de ellos y se enviaban correspondencia para que nadie más los viera. Después cada una comenzó a escribir diferentes historias bastante perturbadoras que se desarrollaban en Malibú, California, Estados Unidos y hablaban sobre diferentes cosas. La primera obra de June se llamó ”Pepsi-Cola addict” esta contaba la historia de un joven que era seducido por un profesor y después fue enviado a un reformatorio en el que era acosado sexualmente por un guardia homosexual.
Por otro lado estaba una historia de Jennifer llamada “The Pugilist” que trataba sobre un doctor que le sacó el corazón a un perro para ponérselo a su hijo que estaba moribundo, luego el alma del perro se quedó con el niño y este intentaba cobrar venganza.
Ellas siguieron escribiendo historias de este tipo y fueron publicadas en una revista llamada News Horizons. Trataron de seguir escribiendo y ser más conocidas por sus escritos, sin embargo no tuvieron el éxito que ellas deseaban, así que decidieron simplemente tomar otro rumbo, hacer otras cosas; empezaron a cometer actos de vandalismo, no sólo robaban sino también provocaban incendios y se lastimaban la una a la otra en público, se dice incluso que una vez Jennifer intentó estrangular a June con un cable y en otra ocasión June intentó arrojar a Jennifer al río. Ellas siguieron con este juego de intentarse matar entre ellas pero también se amaban completamente, esto era una relación bastante extraña.
Para 1982 las gemelas trataron de incendiar un bar, sin embargo fue ahí cuando fueron capturadas. En el juicio se les ordenó ser llevabas a un centro de rehabilitación psiquiátrico llamado Broadmoor por 14 años, siendo este el segundo psiquiátrico con más seguridad de Inglaterra y allí se quedaron durante todo ese tiempo, vale destacar que tenían sólo 18 años de edad cuando se les encerró. Su relación parecía normal, que estaban felices entre ellas mientras estaban juntas en este hospital psiquiátrico, sin embargo después se descubrieron los diarios de June y se descubrió que ella tenía bastante envidia en contra de su hermana Jennifer. Ella escribía en sus diarios que sentí esta envidia porque Jennifer era muy superior a ella en todos los sentidos, incluso una vez June escribió una frase que decía: ”Ella quiere que seamos iguales. Hay un brillo asesino en sus ojos. Querido Dios, tengo miedo de ella. No es normal… Alguien la está volviendo loca, y soy yo”. Finalmente le hicieron un examen a ambas hermanas y se les diagnosticó con la enfermedad de la esquizofrenia por ende para controlar los estados de ánimos que ellas tenían se les suministraban altas dosis de medicinas y analgésicos de tal manera que les era muy difícil concentrarse en distintas actividades.
Jennifer debido a estos medicamentos desarrolló una enfermedad que hacía que tuviera movimientos repetitivos e involuntarios. Todo esto las desgató mucho tanto física como mentalmente pues fue así como dejaron de escribir todas estas historias también que estaban elaborando anteriormente.
Las gemelas seguían actuando extraño entres ellas así que los médicos en forma de castigos las separaban, sin embargo, a causa de esto las hermanas comenzaron a actuar de manera muy extraña. Incluso los enfermeros cuentan que ambas se mantenían totalmente quietas por horas como si estuvieran simplemente congeladas en el tiempo. No hacían absolutamente nada, al ver esto los médicos se dieron cuenta que no podían dejarlas separadas durante mucho tiempo. Ellas trataron de entablar relaciones con los enfermeros poco a poco, aunque esto no fue una relación muy abierta. Ya cuando se les notaron mejorías a ambas fueron trasladadas a un hospital psiquiátrico de menor seguridad. Allí fue cuando se dio a conocer esta historia pues una periodista del periódico The Sunday Times se enteró de todo lo que estaba ocurriendo con estas dos personas así que decidió contar la historia de ellas. Comenzó a visitarlas regularmente y ella se convirtió en la primera persona en ganarse la confianza de las gemelas
La periodista se llama Marjorie Wallace y escribió un libro llamado “The Silent twins” contando toda la historia y así fue a ella la única a la que le confesaron el secreto de por qué no halaban con nadie más que ellas dos y es que se habían hecho un pacto en el cuál una de ellas dos debía morir para liberar a la otra y podría tener una vida normal, podría hablar con todo el mundo, seguir su vida como si nada y esto fue bastante impactante de conocer para la periodista, después que ellas confesaran esto. Hallaron sentido del por qué ellas intentaban constantemente asesinarse entre sí, y esto duró durante muchos años más, sin embargo, Jennifer decidió sacrificarse por el pacto. Para marzo de 1993, ambas gemelas fueron trasladadas esta vez a otro hospital de menos seguridad y lo extraño es que cuando iban en el auto justo antes de llegar Jennifer no se despertó nunca más, ella estaba recostada en el hombro de su hermana June y parece que así fue cuando murió. Lo extraño es que cuando se llevó para hacerle la autopsia los resultados arrojaron que no había muerto por ninguna causa de envenenamiento ni asesinato o algo así, sino que fue una muerte natural; parece que le dio una inflamación en el corazón ocasionando un paro cardiaco y murió allí. Varios días después nuevamente la periodista fue a visitar a June para ver cómo estaba y se sorprendió al ver que ella estaba en un humor completamente diferente.
June: ”Soy libre al fin” “finalmente Jennifer ha dado su vida por mí”.
Finalmente June se recuperó de repente, ya no tenía problemas para socializar, la esquizofrenia había desaparecido totalmente así que fue liberada del hospital. En el 2008 dejó de recibir atención psiquiátrica y se supo que empezó a vivir completamente libre y seguía con su vida normal.
Se dice que cuando su hermana murió ella escribió: ”Una vez fuimos dos, las dos éramos uno. No fuimos más dos, sino una a través de la vida. Descansa en paz”.