¿Qué generación somos?.
Dedicados a pensar en el futuro y no vivir en el presente.
A decepcionarnos constantemente.
A sufrir las políticas de algunos países.
A enamorarnos de lo imposible.
Ahogarnos en el existencialismo.
Llorar por las noches.
Reír y sonreír en los días.
Convertirnos en viciosos.
Luchar contra la ansiedad la mayor parte del tiempo.
Cansarnos por todo con tan solo casi dos décadas encima.
Morirnos de hambre y no de miedo.
Soñar más despiertos que dormidos.
Ser grandes sin salir de la cama.
Más problemas que sangre.
Malas decisiones como granos de arena en la playa.
Orgullosos como si fuéramos dioses.
Tercos como los "quizás quisiste decir" de Google.
Rebeldes pero no precisamente por la serie.
Rodeados de doble moralidad.
Algunos parecidos a un escalímetro por sus múltiples caras.
Sofisticados pero ilógicamente carentes de sutileza.
Estar en el centro del huracán por nuestro año de nacimiento.
Para algunos vivir la que tenía que ser la mejor etapa de nuestras vidas en la peor etapa de un gobierno.
Ahogarnos en un mar de dificultades mientras los demás solo ven un vaso de agua.
Poseer un arma eficaz y poderosa, y solo utilizarla para hundir a los nuestros, o para difamar la maldad del mundo.
Una parte de esta prole será marcada como la generación que recobró alguna de las costumbres de sus padres y sus abuelos. Recolar el café, tomarlo sin azúcar, moler el maíz, recolectar granos, sobrevivir con sopa de auyama, con mango, trabajar por poco o quizás nada; solo por las sobras de una riqueza abandonada o mal explotada.