dejarlo ir, te falto sin rencores o resentimientos, tener en cuenta que todos somos humanos, cometemos errores, que en algún momentos de la vida nos enseña que aquello que no valoramos esta ausente, esa ausencia nos hace reflexionar que falta la esencia, la llama, la chispa, pero en nosotros, aprendemos a ver luego que eso que dejamos ir aunque nos duela, nos hizo vivir cosas maravillosas y se convierte automáticamente en gasolina para poder seguir adelante.