LA RELACIÓN ENTRE LA LIBERTAD Y EL DESARROLLO
Establecer una relación entre estos dos tópicos (libertad y desarrollo) pasa primero por tomar en cuenta la concepción de los mismos, los distintos enfoques a través del tiempo histórico ayuda a encontrar una mejor perspectiva, Aristoteles aborda la libertad como:
Con carácter general, el concepto de libertad - especialmente a nivel personal - presupone la disposición de una posibilidad de elegir. Esa posibilidad de elegir presupone a su vez la de disponer de elementos de juicio que conduzcan a la elección; lo que requiere la posesión del conocimiento de los componentes de esos elementos de juicio, y de la inteligencia adecuada para valorarlos debidamente y discernir acerca de la conveniencia de la elección. Al mismo tiempo, la libertad no es absoluta. el hombre no dispone de una posibilidad absoluta de elegir: no es posible elegir en contra de lo que disponen las leyes de la Naturaleza; ni es admisible ejercer una supuesta libertad en perjuicio de otros.
Por su Parte Kant la plantea como “Capacidad de los seres racionales para determinarse a obrar según leyes de otra índole que las naturales, esto es, según leyes que son dadas por su propia razón; libertad equivale a autonomía de la voluntad” en todo caso la definición de libertad que está más ligada al estudio económico es, claro está, la libertad económica.
Según Heritage, la libertad económica es “el derecho fundamental de todo ser humano de controlar su propio trabajo y propiedad. En una sociedad económicamente libre, los individuos son libres de trabajar, producir, consumir e invertir en todo lo que quieran”.
La relación existente entre la libertad y el desarrollo ha generado extensos debates entre quienes consideran este factor es en efecto un incentivo para el desarrollo y los detractores de esta idea.
Este debate se puede remontar hasta Adam Smith,
Una economía guiada por mercados libres funcionaría mejor que una controlada por el gobierno. En su opinión, si a todos los hombres se les permite actuar libremente para trabajar donde y como ellos quieran y para cobrar los precios que deseen; si estos hombres tienen un máximo de libertad para intentar maximizar su ganancia personal; si todos los hombres actuaran en función de sus propios intereses, persiguiendo cualquier empresa que mejor satisfaga sus necesidades, egoísmo y avaricia; si los gobiernos mantienen sus manos fuera de la economía, el resultado no sería el caos, la anarquía o una jungla de egoísmo social destructivo; en su lugar existiría un orden armónico en el cual las fuerzas automáticas de la oferta y la demanda, funcionando en un ágil y elástico libre mercado permitirían usar más eficientemente todos los recursos (trabajo, tierra, capital, habilidades, cerebros, ingenio, inventiva) para ofrecer las mayores y más duraderas ventajas a la nación (Rosten, 1990, pág. 8).
Un claro ejemplo de quienes argumentan la libertad individual como factor importante para el crecimiento económico, son los partidarios de la escuela Austriaca del pensamiento económico, quienes realizan sus análisis partiendo de las elecciones que hacen los individuos, quienes a través de su accionar influyen tanto en las decisiones económicas gubernamentales como en el bienestar social, asumiendo además que la intervención del estado en los procesos de mercado tratando de dirigir las elecciones ciudadanas solo generan distorsiones entorpeciendo el funcionamiento de la economía, así pues, un entorno de libertad es fundamental para fortalecer el crecimiento económico de los individuos quienes repercuten directamente en el bienestar social y el desarrollo de las economías.
Hayek consideraba que incluso una pequeña cantidad de planeación económica requiere de maquinaria coercitiva para actuar de acuerdo con los planes que han sido decididos; establece que, en lugar de tratar a las personas por igual, el planificador socialista tiende a tratarlos como instrumentos para lograr el éxito del plan económico. En el segundo libro establece las bases del ideal de libertad, que en su opinión ha fundado, en parte, a las modernas sociedades occidentales. Su argumento se divide en tres secciones. La primera contiene los fundamentos: la naturaleza de la libertad, su valor y relación con respecto a otros valores y objetivos. La segunda sección está dedicada a mostrar su posición en relación con la constitución del pivote de la libertad: el imperio de la ley, sus características esenciales y vicisitudes. La tercera se titula “Libertad en el Estado Benefactor” y consiste en una serie de aplicaciones de los principios desarrollados para los problemas de política (Robbins, 1961, pág. 66).
A partir de los argumentos expuestos en ambos textos es posible concluir que, para Hayek, la libertad se encuentra en la espontaneidad y en la ausencia de coerción. Así reafirma los principios de la práctica del liberalismo en términos modernos. En ambos tratados muestra cómo una sociedad es una cosa compleja, más allá de la capacidad de comprensión de cualquier mente individual, y por tanto resulta imposible planearla. En su opinión, la libertad individual es necesaria y cualquier intento para inhibirla terminará por violentar el orden social. (Sanchez, pág. 43).
Esto no es descabellado puesto que el desarrollo no puede estar desligado de la cotidianidad de quienes hacen vida dentro de la economía, ya que los distintos factores propios del desarrollo como el aumento del PIB, del PIB per cápita, industrialización, avance tecnológico o modernización entre otros, son parte de la vida de los individuos e influyen directamente en su calidad de vida de la población.
Entonces, desde esta perspectiva se plantea la libertad como un medio importante para alcanzar el desarrollo, sin embargo, la misma se puede ver desde un enfoque en que la libertad, en sí misma, sea el objetivo del desarrollo.
Volviendo al enfoque de la libertad como medio para el desarrollo, el accionar económico de los individuos y lo que los mismos puedan alcanzar, está ligado a las oportunidades estos tengan dentro de la sociedad, estas oportunidades van de la mano con las libertades económicas, las libertades políticas, las instituciones sociales y demás factores (educación, salud, etc) que funcionan como piso para aumentar las capacidades de la población y como incentivo a la creación.
Si bien existe quienes creen que las características de un sistema democrático no van necesariamente ligadas a un aumento del desarrollo, esto puede servir de argumento para impulsar sistemas no democráticos que en términos de aumento de PIB tengan una mayor significancia, sin embargo, si lo vemos en términos de calidad de vida, un individuo que no goce de la libertad de escoger el sistema en el que hace vida no tiene necesariamente una alta calidad de vida. Vistos desde el primer enfoque, se puede acotar que la estabilidad económica en términos del desarrollo no necesita necesariamente un clima de libertades políticas.
El papel de las transacciones en la relación entre la libertad y el desarrollo es fundamental, un escenario de libertad transaccional es favorable en cuanto a la confianza que se genera en el ámbito económico.
Una relación básica entre la libertad y el desarrollo es en la transparencia y la corrupción. Entre más libre sea un país, menos corrupto será. Una forma de comprobar esto es revisando los resultados del estudio de 2012 sobre corrupción de Transparency International, en donde las naciones menos corruptas coinciden una vez más con las que mayor libertad económica tienen, mientras que países como Corea del Norte, Venezuela o Birmania se encuentran en los últimos lugares.
En lo que se refiere a desarrollo humano, está claro que tener un alto grado de libertad económica sí proporciona un alto grado de desarrollo, pero la poca libertad económica no necesariamente significa tener un bajo nivel de desarrollo humano. Si bien naciones con baja libertad económica como Corea del Norte, Zimbabue o Haití no son un referente en el desarrollo humano, otras como Irán, Argentina o Brasil sí cuentan con mejores condiciones para esto.
Así pues, visualizar el desarrollo desde el punto de vista de las libertades ofrece un panorama quizá un poco más aproximado a la realidad que desde indicadores como el PIB o como el progreso tecnológico, ya que estos no comprenden en sí mismos aspectos importantes de la cotidianidad de la población que influyen en el desarrollo.
Referencias Bibliográficas:
De Ampuero, D. Modelo de crecimiento económico austriaco basado en la estructura del capital.
Sanchez, Isaac. Libertad económica y crecimiento económico: teoría y evidencias. Mexico. Caminos de la libertad.
Sen Amartya. (2002) ¿De que trata el desarrollo?.Washington. Alfaomega-Banco Mundial.