El sábado fui al mercadito de los gochos, así los llaman porque los productos que traen vienen de los andes de Venezuela, y me conseguí con esta hierba, el cibule, la verdad no la conocía, me la recomendaron las personas que estaban en la cola junto a mí, y me comentaron que esta rama era de la misma familia del cebollín.  

 Me puse a investigar y si es verdad el cibule también conocido como cebollino, y se trata de  una hierba de la familia de las aliáceas, de la que se utilizan sólo las hojas picadas como hierba aromática; su bulbo, tiene un sabor muy similar al de la cebolla blanca pero me dicen que no se consume.

 Se diferencia de la cebolla por la  mayor dimensión, incluso llegando a duplicarla en tamaño, de la que se utiliza el bulbo pero no la hoja.  

 En cuanto al cultivo el cibule prefiere ubicaciones soleadas y suelos húmedos, ligeramente arcillosos. Puede cultivarse a partir de semilla con facilidad, o por división del bulbo con las raíces después de su extracción. Se comercializan sólo sus hojas. 

                                                        Las bondades del cibule:  

 Nutrición.   

Es bajo en calorías; aun así, contiene numerosos flavonoides antioxidantes, fibras, minerales y vitaminas que nutren y fortalecen el organismo. Su consumo aporta al cuerpo más fibra que el resto de sus parientes, como la cebolla o el puerro. 

  Colesterol   

Al igual que sus parientes, el cibule posee compuestos antioxidantes que inhiben enzimas en las células del hígado, reduciendo los niveles de colesterol.   

Antibacteriano

 Se ha encontrado que posee propiedades antibacterianas, antivirales y anti-fúngicas.   

Sistema circulatorio   

Algunas sustancias presentes en el cibule reducen los endurecimientos en las venas, pues liberan ácido nítrico, por lo que disminuye la presión arterial total. También bloquea la formación de coágulos y tiene acción fibrilar en los vasos sanguíneos, con lo que se logra minimizar los riesgos de padecer arteria coronaria, enfermedades vasculares periféricas e infartos.  

 Fuente de vitaminas.   

Vitamina C. Excepcionalmente en relación con la familia de plantas a la que pertenece, contiene mucha vitamina C. Junto a otros antioxidantes, esta vitamina ayuda a proteger el cuerpo del cáncer de pulmones y el de la cavidad bucal. Vitamina K. Es una de las mejores fuentes naturales de vitamina k, por lo que ayuda en la formación y fortalecimiento de los huesos. Un nivel adecuado de vitamina K en el cuerpo limita los daños neuronales en el cerebro. Tiene una función para tratar el mal de Alzheimer. Hierro. El cibule fresco es una  fuente de ácido fólico, compuesto esencial en la síntesis del ADN y en la división celular.  

  Después de haber visto tantos beneficios para el organismo que me ofrece el cibule, de ahora en adelante, lo voy a agregar en mi dieta cotidiana. Lo voy a utilizar como aliño en preparación de carnes, sopas y ensaladas, para asegurar que se aumente el consumo diario de vitaminas y minerales, tan importantes para el cuerpo humano.