VIERNES DE HUMOR (MI ESPOSA Y SUS COSAS)
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Desde que comenzamos a vivir juntos María Teresa (@sayury) y yo, tengo la costumbre de dormir con los dedos de su mano entrelazados entre las mías. Sin embargo, cuando nuestro hijo Luis Felipe (@luisfe) tenía unos tres años de edad tomó el hábito de pasarse en la madrugada una o dos veces por semana a nuestro cuarto, subirse a la cama, desentralazar nuestros dedos, poner su manita en la de su mamá y quedarse dormido allí hasta la mañana.
Cuando mi esposa despertaba, si sentía entre sus dedos otros largos y una mano grande sujetando la suya sabía que era yo, si, en cambio, sentía entre sus manos una pequeñita ya sabía que Luis Felipe se había pasado a nuestra cama otra vez.
Debo aclarar, ante todo, que María Teresa no se caracteriza por ser valiente. Le tiene miedo a la oscuridad, fobia a las alturas, terror a las cucarachas, pavor a los truenos…
Bueno, una madrugada se despertó y sintió sus dedos entrelazados con otros. De inmediato notó que los mismos eran muy pequeños para ser los míos pero muy grandes para ser los de Luis Felipe. Con los ojos aún cerrados ella dice que tuvo mucho miedo lo cual yo, que la conozco bien, traduzco como que se aterrorizó. No se atrevía a abrir los ojos pensando “Si esta mano no es la de Orlando ni la de Luis Felipe ¿A quién estoy sujetando yo?” Sudó, tuvo mareos, la respiración se le entrecortó, cuenta ella que le dio de todo.
Al fin hizo de tripas corazón y se atrevió a abrir los ojos para encontrarse con que tenía entrelazados los dedos de su mano izquierda con los de su mano derecha. Ya Luís Felipe va para 16 años y, sin embargo, nunca deja de hacernos sonreír este episodio.
Hola. Dios que hermoso dormir así. ¡eso es AMORRRRRRR!!!!!!. ¡AY! QUE BROMA CON LA AMIGA SAYURY, TOMÓ SU PROPIA MANO Y NO LA IDENTIFICABA, GUAOOOO, seria bueno, que tome algo para esos nervios. Recordar es vivir, vivir es recordar, claro cosas buenas y graciosas como estas.
Ja, ja, ja, sí,@laversalinazeoli, siempre hay recuerdos gratos que nos hacen reír y podemos hacer reír a otros también ¿Qué tal si te animas en uno de estos "viernes de humor" a compartir con nosotros una anécdota también?
Ja,ja, ja, muy cierto, @orlandeto, nunca deja esta anécdota de hacernos sonreír. Muy bien contada y, de veras que esa noche estaba aterrorizada o, como decimos por acá chorreadita porque al abrir los ojos no sabía s i me enfrentaría a un espectro, un extraterrestre o quién sabe a qué horrible criatura a la que sostenía de la mano. Jajajaja.